El flamenco ameniza el acto del Día Mundial de los Gitanos Andaluces

Los pañuelos verdes con lunares blancos y las guitarras de fondo con el himno internacional del pueblo gitano, el Gelem Gelem, impregnaron ayer de música y color el Centro Gitano en el Día Internacional de los Gitanos Andaluces.

En el acto estuvo presente el cantaor Juan Pinilla, que leyó un manifiesto que reivindicaba que "los gitanos vinieron a traer luz a nuestra tierra, Andalucía". Una luz que indica que la sociedad del siglo XXI no debe seguir asociando a los gitanos a ámbitos de marginalidad y delincuencia "porque tenemos mucho que aportar".

Desde el punto de vista de los gitanos, el racismo sigue existiendo "por desconocimiento" y advirtieron de que la imagen que se tiene de ellos no se corresponde con la realidad actual. "El 70% de la población gitana está insertada en la sociedad y ya hay muchos gitanos en la universidad, sobre todo mujeres", expresó la orientadora educativa de la Fundación para el Secretariado Gitano, Luisa Fernández.

Por su parte, la mediadora laboral de la Fundación del Secretariado Gitano, Azucena Fernández, utilizó la figura del "gitano invisible" para referirse a muchas gitanas que no cumplen el rol de "la típica con moño y flor en la cabeza". A lo que añadió que cuando el resto de compañeros saben que "eres gitana dicen que tú no eres como las demás, por lo que también se muestra un cierto racismo encubierto".

La ceremonia se amenizó con flamenco, un arte ligado al pueblo gitano que ya forma parte de la cultural internacional como Patrimonio de la Humanidad. Al baile, Ana Calí, también mostró que además de saber taconear y tener ritmo, es una mujer que rompe estereotipos "porque la mayoría de la gente no piensa que los gitanos vayan a la universidad. Ella que estudió Derecho y se dedica al baile de forma profesional advirtió que " al gitano se le exige mucho para poder estar en igualdad de condiciones con un payo".

La delegada de Igualdad y Bienestar Social de la Junta de Andalucía, Magdalena Sánchez , matizó que " es un reto hoy día ofrecer una imagen distinta de los gitanos".