Granada alcanza un nuevo máximo en pisos turísticos a la espera de los efectos de las restricciones impuestas

Granada vuelve a marcar un máximo en el número de viviendas de uso turístico. La capital suma, según los últimos datos publicados por el INE y actualizados al mes de mayo, 3.184 de estas viviendas, lo que supone casi un centenar más de las contabilizadas el pasado noviembre (3.059), haciendo que la ciudad mantenga la tercera posición entre las capitales andaluzas por detrás de Sevilla (7.137) y Málaga (8.597). Este incremento se produce a pesar de que el Ayuntamiento de esta ciudad libra una batalla política y judicial para limitar este tipo de alojamientos y puede ser atribuible a una carrera final por obtener el permiso antes de que entraran en vigor las sucesivas limitaciones impuestas. Los barrios más céntricos, por ejemplo, ya tienen lleno el cupo del 10% previsto como límite recién impuesto.

Queda por ver también a partir de ahora el impacto que la obligatoriedad de registrar estas viviendas, cuya implantación entró en vigor el 1 de julio, tiene en los números de Granada. En este sentido, los datos ofrecidos por el Instituto Nacional de Estadística se antojan interesantes, ya que emplean la técnica de web scraping para extraer los datos de las tres plataformas más utilizadas de alojamiento turístico en España, precisamente los que obliga el Ejecutivo a tener un número de registro para poder anunciarse. Los datos de mayo sirven así de foto finish para medir el impacto real de esta medida.

A nivel provincial, tampoco hay gran novedad. La capital ostenta el primer puesto y concentra más de una tercera parte de las 8.300 viviendas turísticas de la provincia (en un nuevo baile de cifras, la Junta de Andalucía eleva la cifra hasta los 9.000), seguida de los principales municipios costeros, comenzando por Almuñécar (1.632), Salobreña (422) y Motril (330). Destaca aquí Monachil, que se suma a la fiesta y se coloca como tercera localidad granadina en cuanto a viviendas turísticas con 723, un 10% menos que la anterior actualización.

De cualquier forma, es claro las viviendas turísticas granadinas se concentran en localidades con algún atractivo turístico (la posición de Monachil podría estar justificada por Sierra Nevada). Así, cabeceras de comarca como Guadix o Baza ni siquiera llegan al centenar de pisos, al igual que otros como La Zubia, Armilla o Maracena.

De los 174 municipios que vertebran Granada, más de un 60% cuentan con diez o menos de estas viviendas en su territorio, y el INE deja a más de una treintena con el casillero vacío.

La sorpresa salta en el porcentaje de viviendas turísticas en relación con el total de viviendas censadas. De acuerdo a los datos del INE, esta relación se queda en la capital en un 2,2%, a una distancia prudencial del 3,6% de Salobreña o el 5,5% de Almuñécar, pero sin duda llama la atención que Monachil cuenta con 9,1% de viviendas de este tipo (debido a la estación de Sierra Nevada, cuya urbanización, Pradollano, es parte de este término municipal), mientras que en Carataunas, en la Alpujarra y con menos de 300 habitantes, que refleja el porcentaje más elevado, con el 11,7%.

Los datos contrastan con otros puntos de Andalucía, especialmente Málaga, con localidades como Nerja o Frigiliana, donde el porcentaje es superior al 10%; o Cádiz, con Tarifa o Conil de la Frontera rondando el 15% en la relación entre viviendas turísticas y totales.

De hecho, en comparación con las otras provincias andaluzas, Granada se encuentra lejos de esos puestos que sí ocupa la capital y muestra cómo el peso turístico y el administrativo no suelen ir de la mano. Así, aunque Málaga sigue siendo líder indiscutible con cerca de 50.000 viviendas, el segundo lugar lo ocupa Cádiz (16.624), seguida de Sevilla, con 8.719, frente a las 8.305 granadinas, una cifra que también crece respecto a las cifras de noviembre, cuando Granada sí era la tercera a nivel andaluz.

Por detrás queda Almería, con 7.266 y a bastante distancia Córdoba y Huelva, en los 2.000 ambas, y finalmente Jaén, con algo más de 1.100 en marzo de este año.

Un ascenso que solo paró el Covid

El Instituto Nacional de Estadística realiza esta métrica de viviendas turísticas en varias oleadas anuales desde 2020. La primera de aquel año, referida al mes de agosto, contabilizaba 2.463 pisos destinados a uso turístico en la capital; la siguiente, en febrero de 2021 redujo significativamente el número hasta los 2.082, la única muesca en la culata de una gráfica claramente ascendente, hasta llegar los ya citados 3.184.

La caída de ese indicador corresponde a la segunda gran ola de la pandemia del Covid-19, lo que obligó a sacar muchos pisos del mercado turístico y destinarlos a otros fines, como el de alquiler estudiantil. Una correlación que ya apuntó el estudio encargado por el Ayuntamiento para conocer precisamente la situación de los pisos turísticos en la capital.

En aquel informe, sus responsables afirmaban durante la pandemia “la imposibilidad de que las viviendas de uso turístico siguieran operando como tal” tuvo como consecuencia que estas reincorporase al alquiler residencial, provocando una caída del precio de este alquiler.

La Costa empieza a notar el efecto verano en el número de viajeros en sus apartamentos

La llegada del verano supone la temporada alta para gran parte de los negocios de la Costa Tropical, incluidos los pisos turísticos. Los últimos datos del Instituto de Estadística y Cartografía de Andalucía (IECA), actualizados a marzo de este año, muestran que tanto este mes como el anterior arrojan una tendencia al alza en el número de viajeros en los pisos turísticos de Almuñécar –el instituto de estadística solo desagrega cifras de esta localidad, Monachil y la capital–.

De esta forma, enmayo la localidad sexitana cobijó en sus apartamentos turísticos a 1.692 viajeros, cuando en el primer mes del año solo fueron 738.

Esos viajeros estuvieron un tiempo medio de cuatro días en la localidad, una cifra que, sin embargo es una de las más bajas de este año (en abril fueron 3,9) y se queda muy lejos de los once días de media alcanzados en marzo, con un total de 5.518 pernoctaciones (el último dato habla 6.799 noches en los pisos de Almuñécar).

Por su parte, el comportamiento en la capital es algo más herrático, pues comenzó el año con 17.600 viajeros, para caer en febrero, repuntar en marzo y abril, espoleados por la Semana Santa y la ampliación de la temporada en Sierra Nevada, y volver a bajar en el último mes, cuando se contabilizaron 21.256 viajeros, según el IECA.

En Monachil, donde aún no hay datos provisionales de 2025, se cerró el pasado año 30.674 viajeros –un año antes fueron más de 46.000– en los pisos turísticos y una estancia media 2,2 días