Granada frente al suicidio: siete de cada diez personas que piden ayuda tienen menos de 35 años

En el Día Mundial para la Prevención del Suicidio, la provincia trata de frenar con concienciación una tendencia que no para de crecer incluso entre los menores de edad

Granada vive el Día Mundial para la Prevención del Suicidio como la provincia andaluza en la que más casos se producen

Un cartel mostrado en una concentración por el Día Mundial para la Prevención del Suicidio
Un cartel mostrado en una concentración por el Día Mundial para la Prevención del Suicidio / G. H.

Las cifras siguen siendo estremecedoras. En 2024, 96 personas se quitaron la vida voluntariamente en Granada (64 hombres y 32 mujeres). El Instituto Nacional de Estadística (INE), en sus datos sobre causas de defunciones del pasado año, pone números a una realidad que existe y a la que la sociedad ha comenzado a enfrentarse con conciencia. Ya se mira de frente a este problema, aunque aún cabe margen de mejora. Sobre todo con los jóvenes, los más afectados por una problemática que va más allá de la salud mental. Entre ese centenar de personas cáda vez hay más menores de edad y personas con no más de 35 años que piden ayuda para no sumar una historia más a ese total.

Los datos hablan por si sólos: un 70% de las personas que contactan con entidades de ayuda frente a conductas suicidas tienen menos de 35 años, y un 25% de ellos son menores de edad. Incluso, de manera incipiente, son muchas las personas que llegan a estos servicios derivadas por asistentes de inteligencia artificial como ChatGPT, lo que pone de relieve la importancia de contar con canales de comunicación accesibles y gratuitos para la población y obliga a reflexionar sobre el uso que la población está haciendo de estas herramientas digitales cuando se enfrenta a un sufrimiento emocional.

Detrás de esta realidad, el Teléfono de la Esperanza de Granada atiende numerosas peticiones de ayuda cada año. La soledad y la incomunicación son las principales razones de un problema de fondo que va más allá de ambas razones, y que acaba derivando en conductas suicidas que se tratan de evitar. "Se trata de una realidad que no se puede seguir ignorando", aseguran desde la organización. Lejos quedan ya los días de estigmatización social, de rechazo y de mirar para otro lado. Sigue existiendo esa forma de pensar, pero la sociedad cada vez es más consciente de que hay personas que se quitan la vida porque sufren. Y ahora, cada vez más, se lucha para entender el por qué y ayudar para evitarlo.

Respecto al aumento de estas tendencias entre la población joven, desde la organización señalan que el suicidio "es una problemática con un fuerte impacto en redes sociales y otros espacios digitales". Por ello, "es necesario desarrollar acciones específicas que permitan una intervención temprana en estos entornos, en colaboración con plataformas digitales y expertos en salud mental. La prevención del suicidio debe adaptarse a los nuevos escenarios donde se generan factores de vulnerabilidad", han destacado.

La ayuda necesaria

Aun así, el problema se está atajando poco a poco. Las cifras del suicidio en la provincia de Granada se han reducido respecto a años anteriores. En 2022, fueron 118 las personas que decidieron quitarse la vida, mientras que en 2021 fueron 97. Pero aún hay que seguir trabajando. Estas cifras están por encima de las de víctimas mortales en accidentes de tráfico o de las muertes por violencia machista, para las que sí hay políticas preventivas.

El concejal de bienestar social en el ayuntamiento de granada asiste al acto con motivo del día de la prevención mundial del suicidio
El concejal de bienestar social en el ayuntamiento de granada asiste al acto con motivo del día de la prevención mundial del suicidio / G. H.

Y es que la muerte por suicidio es, desde hace años, la primera causa externa de defunción de España. Este 10 de septiembre, Día Mundial para la Prevención del Suicidio, la OMS estima que todos estos datos son la punta del iceberg, teniendo en cuenta que entre un 20% y un 30% de las muertes por esta causa no se contabilizan como tal, entre otros motivos, por el estigma social. Además, se estima que, por cada suicidio consumado, hay 20 personas que repiten la conducta.

Al hablar abiertamente sobre el suicidio, se reduce el estigma asociado y se fomenta un ambiente de apoyo y comprensión para aquellos que están luchando. La prevención del suicidio implica educar a la sociedad sobre los factores de riesgo y las señales de advertencia, lo que puede ayudar a identificar a las personas en riesgo y brindarles el apoyo necesario.

Plan de acción nacional

Desde el Teléfono de la Esperanza, como organización con más de 50 años de experiencia en la atención y prevención del sufrimiento emocional y la conducta suicida, han valorado positivamente el desarrollo del Plan de Acción para la Prevención del Suicidio 2025-2027 por parte del Gobierno. "Este plan representa un avance significativo en el reconocimiento de esta realidad como una cuestión de salud pública prioritaria y en la necesidad de abordarlo con un enfoque integral y coordinado", han destacado.

Sin embargo, piden fortalecerlo integrando los datos y la experiencia de las diferentes asociaciones en el Observatorio de Prevención del Suicidio, crear una estrategia específica para la prevención en entornos digitales y garantizando la continuidad del plan y su financiación estable. "Este Observatorio es una medida necesaria para mejorar el análisis de la conducta suicida en España. Si su objetivo es un enfoque verdaderamente comunitario, es esencial que el Observatorio no solo tenga en cuenta los datos institucionales, sino que también integre la información y el conocimiento que por su experiencia tienen las asociaciones, y que el Plan de Acción cuente con una financiación independiente dentro de las políticas públicas nacionales", han destacado.

Imagen de una mesa informativa sobre la prevención del suicidio
Imagen de una mesa informativa sobre la prevención del suicidio / G. H.

"Por eso es importante seguir avanzando hacia un Plan Nacional de Prevención del Suicidio, asegurando recursos a largo plazo. Apostar por la continuidad de estas acciones es clave para fortalecer la prevención y la respuesta ante la conducta suicida en nuestro país", han concluido desde la asociación.

El Teléfono de la Esperanza ofrece a los granadinos atención emocional gratuita y confidencial a través del 958261516 y del 717003717 disponible todos los días del año y a todas horas. Además, el Chat de la Esperanza funciona de lunes a domingo de 18:00 a 00:00 horas, y puede utilizarse desde la web del Teléfono o descargando la app Conéctate.social. Ambos recursos están atendidos por personas voluntarias formadas para escuchar y ayudar desde el respeto y la empatía.

Además, si crees que alguien de tu familia o de tu entorno cercano, o tú mismo, podría estar pensando en suicidarse, te recordamos que existen asociaciones y grupos de ayuda para cambiar esta situación. Puedes ponerte en contacto con la Asociación Papageno, la Federación Salud Mental Andalucía, o cualquier otra asociación de ayuda. También puedes contactar con la Línea 024 para recibir ayuda.

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