El sector turístico durante la pandemia

Un hotel de Granada dejará uno de sus edificios reservado hasta final de junio para alojar sanitarios

  • Tendrá una zona habilitada para que los profesionales puedan seguir accediendo a él pese a que abra sus puertas al público géneral

Llegan los primeros sanitarios a hoteles de Granada para aislarse por el coronavirus

Llegan los primeros sanitarios a hoteles de Granada para aislarse por el coronavirus / Antonio L. Juárez (Photographersports)

El Gran Hotel Luna de Granada, que ha estado alojando el último mes y medio a personas desplazadas por servicios esenciales, en virtud de la autorización del Gobierno a tal fin en el marco del estado de alarma, tiene previsto tener reservado hasta final de junio el edificio que tiene habilitado para hasta unos 75 sanitarios. Forman parte del personal médico que trabaja en primera línea contra el coronavirus y que, para evitar desplazamientos que pudieran suponer un riesgo para ellos o su entorno, se aloja en la capital en condiciones de aislamiento para un mejor desarrollo de su labor.

Así, por ejemplo, y según ha detallado el director del Gran Hotel Luna, Juan Castillo, no entran por la puerta principal del hotel, que tiene otros dos edificios, también destinados hasta ahora al "retén de guardia", sirviendo a profesionales de otros sectores como Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, o empresas de suministro.

De cara a la reapertura para público en general, que hoteles consultados no prevén antes de junio, este establecimiento parte de la base de los cambios en el servicio que ya introdujo desde finales de marzo para la atención a estos profesionales, de sectores que han ido aumentando en las últimas semanas, con una media de 70, sobre todo en la parte central de la semana laboral.

El establecimiento, que ha prestado sus servicios en la capital granadina en el marco del plan del Gobierno para dar alojamiento a profesionales de servicios esenciales, ha impulsado cambios como la eliminación de carteles de papel en habitaciones o avisos para el uso individual del ascensor, y otros similares en zonas comunes, donde habrá turnos de limpiadores que repasarán continuamente aquellos sitios que se tocan con frecuencia.

Asimismo, la instalación de dosificadores de gel y la prueba de una máquina de ozono, cuyo uso está pendiente aún de las indicaciones que den las autoridades sanitarias en el momento en que el hotel se vaya abriendo a otro tipo de visitantes, son otras de las tareas que se están planificando.

Los menús personales van a dar paso a un "bufet asistido", que estará protegido por mamparas transparentes y platos individuales tapados, en un restaurante con las pertinentes distancias entre sus mesas. 

En este sentido, Castillo ha destacado la "ventaja" que el Gran Hotel Luna tiene, por las dimensiones del establecimiento, en relación con otros que incluso habrán de abordar obras para adecuarse a los condicionantes para garantizar la seguridad que pongan las autoridades sanitarias para su reapertura.

Uno de los hoteles más emblemáticos de Granada, el Alhambra Palace, tampoco habrá de ejecutar obras, y admite reservas para a partir del 1 de julio, si bien la fecha para su reapertura no está aún definida, habida cuenta además de que, en este caso, el 90 por ciento de su clientela aproximadamente es extranjera.

En este sentido, consultado por Europa Press, su director comercial, Ignacio Durán, ha señalado que el hotel trabajará siguiendo las directrices que marquen Boletín Oficial de la Junta de Andalucía, Boletín Oficial del Estado y Organización Mundial de la Salud, también en la acreditación con los sellos de seguridad que sean pertinentes.

En el proceso de "adaptación interna" se cuenta con un manual, en el contexto de un proceso "vivo", a la par que se exploran las distintas iniciativas que se llevarán a cabo en el hotel para seguir siendo una "referencia" en Granada, ha agregado.

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