Los embalses gestionados por la Confederación Hidrográfica del Gualdalquivir (CHG) en la provincia de Granada siguen de capa caída. Según los datos del Servicio Automático de Información Hidrográfica (SAIH), estas infraestructuras están, de media, a un 37,6% de su capacidad, lo que supone medio punto menos que hace justamente un mes, cuando comenzó el año hidrológico (38,1%).

Por embalses, el que peores datos tiene es el de San Clemente, que está a un 10,8% de su capacidad; el del Negratín, a un 34%; Colomera, a un 38%; Bermejales, al 50%; o el Francisco Abellán al 43%. Todos ellos por debajo de los niveles de almacenaje de hace 30 días. En general, la media de toda la cuenca gestionada por la Confederación, está a un 34,4%, un punto menos que hace un mes.

El dato de estos primeros días de noviembre es el segundo más bajo desde que se ofrecen registros, enero de 2013, sólo por detrás de noviembre de 2017, cuando los embalses de la Cuenca del Guadalquivir en Granada estuvieron a un 30%.

En cuanto a los embalses gestionados por la Junta, los de Rules –sin uso a falta de las canalizaciones– y Béznar, están al 76,7% de su capacidad. Las dos infraestructuras lucen mejores datos que los de hace un año, cuando entre los dos sumaban 144 hectómetros cúbicos. Hoy llegan a 163.

En el último informe de la sequía publicado, del pasado mes de octubre, se señala que el sistema o unidad territorial denominado Vega Alta y Media de Granada se encuentra un mes más en situación de prealerta, mientras que el resto de unidades se mantienen en situación de normalidad.