Así vuelve del macrojuicio del caso Serrallo en Granada: con mamparas, sin togas y sin Torres Hurtado
El exalcalde y otros acusados se ausentan de una sesión dedicada a la declaración de peritos de las defensas, que declaran no haber recibido presiones para autorizar la discoteca en zona verde
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El mismo día que Granada inaugura la fase 3 de la desescalada para el regreso paulatino a la normalidad, la Audiencia de Granadaha retomado el macrojuicio del caso Serrallomacrojuicio del caso Serrallo donde lo dejó en marzo pasado. Pero hay novedades: con mamparas y otras medidas de seguridad, sin público y sin la presencia de gran parte de los acusados, en especial el exalcalde José Torres Hurtado, que no ha acudido a la sala de vistas donde se enfrenta a penas de cárcel por supuestos delitos de corrupción.
La sala Antonio Angulo de la Caleta, que ya fue adaptada para el inicio de este macrojuicio en febrero, ha vuelto a ser modificada para la vuelta de las sesiones tras el Covid. Se trata del primer macrojuicio que se celebra en Andalucía desde que se declaró el estado de alarma. Hoy le tocaba declarar a testigos peritos, que han negado presiones en la tramitación de una discoteca en espacios verdes.
Con cuatro filas de asientos del público retiradas y con mamparas y elementos de separación y seguridad, acoge desde hoy tres semanas de vistas pendientes en esta causa, que estaba prevista su finalización para antes de Semana Santa, pero ahora llegará a las puertas del verano.
El juicio, con 17 acusados y más de 20 letrados además del fiscal y el tribunal, continúa con letrados y tribunal sin toga pero con mascarilla, aunque con algunas ausencias como la del exalcalde José Torres Hurtado, uno de los acusados, que aunque asistía a las sesiones anteriores no lo hará desde ahora por el riesgo sanitario. Tras la declaración de todos los procesados, la Audiencia ya permitió que pudieran ausentarse por lo extenso del juicio, incluso antes de la suspensión por la crisis sanitaria.
En la primera sesión desde que comenzó la pandemia han declarado como testigos peritos tres trabajadores del Ayuntamiento y uno de la empresa García Arrabal, promotora del Serrallo.
En una sesión dura y en la que el presidente ha reclamado "comprensión" por la actual crisis sanitaria y ha impedido la reiteración de preguntas, los peritos han coincidido en explicar que no existió trato de favor alguno para la promotora ni recibieron indicaciones o presiones para redactar sus informes en un sentido o en el contrario.
Tanto la jefa del servicio de Infraestructuras como la subdirectora de Licencias han negado que faltara transparencia en la gestión de los expedientes, "siempre se ha trabajado con muchísima libertad", mientras uno de los inspectores municipales ha reiterado que no recibió "instrucciones para un trato de favor, ni en este ni en ningún otro caso".
Durante las tres próximas sesiones, por la sala pasarán peritos de parte para analizar la licencia que permitió una discoteca en zonas verdes, aunque el tribunal ha incidido en la necesidad de evitar reiteraciones con el argumento de que los datos ya se conocen, están en el expediente o porque "la sala lo tiene ya todo claro".
En su escrito, la Fiscalía solicita ocho años de cárcel, 36 años y medio de inhabilitación y multa de 522.000 euros para Torres Hurtado, la que era su concejal de Urbanismo, Isabel Nieto; el exdirector de Obras Manuel Lorente, y el promotor García Arrabal.
El conocido como caso Serrallo, que previsiblemente acabará con el derecho al uso de la palabra final de los acusados el 24 de junio es distinto al que provocó la detención y posterior dimisión de Torres Hurtado, la Operación Nazarí en la que también fue detenida la que era su edil de Urbanismo, Isabel Nieto, acusada en esta causa.
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