El Hospital Universitario Virgen de las Nieves trabaja ha informado sobre el avance de las obras de los nuevos paritorios, una de las actuaciones que se están llevando a cabo en el centro dentro de Plan de Infraestructuras Sanitarias que la Junta de Andalucía presentó ayer para Granada. Este hospital acapara una inversión de 9,2 millones de euros, la mayor de su historia desde su construcción.

Las nuevas salas de alumbramiento se encuentran en torno al 40% de ejecución y se ejecutan en el ala derecha de la tercera planta del Hospital Materno Infantil, en una superficie de mil metros cuadros, de los que 650 están destinados a ocho paritorios, uno de ellos con bañera de parto, y el resto a una sala de preparación de cesáreas y dos quirófanos, según detalla el hospital, que ha llevado a cabo 3.352 partos en lo que va de año. Las obras deberán estar acabadas para el 31 de diciembre, como expresó ayer el consejero de Salud, Jesús Aguirre.

Los nuevos paritorios están preparados para que, tanto la dilatación como el nacimiento del bebé y la recuperación de la madre, se realicen en la misma sala, y que solo en excepciones, como cesáreas o partos especiales, la mujer tenga que ser trasladada al quirófano anexo.

Este nuevo sistema ofrece varias ventajas con respecto al que se realiza en la actualidad, como un mayor aprovechamiento del espacio y de los recursos disponibles, eliminación de recorridos innecesarios, simplificación del procedimiento y, sobre todo, tal y como indica la directora gerente, María Ángeles García Rescalvo "una gran mejora en la calidad de la atención de nuestras pacientes durante el proceso de parto", en declaraciones facilitadas por el hospital.

El Virgen de las Nieves ganará así en funcionalidad y confortabilidad. Cada uno de los paritorios dispone de baño y ducha propia y de mobiliario adaptado para que los profesionales sanitarios puedan desarrollar su labor con comodidad, seguridad, eficiencia y calidad asistencial, "todo en un ambiente idóneo dentro de los estándares de la humanización y con un nivel de vanguardia", señala García Rescalvo.

Con la puesta en marcha de esta nueva área de Obstetricia, previsiblemente para finales de año, el hospital da respuesta a una atención más humanizada durante el preparto, parto y posparto. Se preserva la intimidad de la embarazada y su acompañante durante todo el proceso del nacimiento asegurando el bienestar de la madre y del bebé tanto en los aspectos técnicos como emocionales.

También se favorecen las necesidades de la gestante en cuanto a la elección del tipo de parto, posición, movimiento y métodos analgésicos, y sobre todo, el vínculo afectivo entre los padres y el recién nacido, y el fomento de la lactancia materna.

Con la irrupción de la pandemia de Covid-19 se adaptaron los circuitos y protocolos de las Urgencias obstétricas y ginecológicas con modificaciones y actuaciones necesarias para estar preparados ante sospechas que afecten a las mujeres que acuden a este servicio. Para ello, existe un doble circuito diferenciado, uno de ellos para pacientes con sospecha que puedan estar afectadas por coronavirus, con un box de aislamiento, y un quirófano y paritorio específico.