Las personas sin hogar de Granada con Covid, obligadas a pasar la enfermedad en la calle

El grupo municipal de Podemos-IU ha denunciado hoy la vulnerabilidad que sufren las personas sin hogar que contraen el Covid en Granada y que se ven obligados a seguir en la calle ya que "desde las instituciones no se les atiende ni se les ofrece posibilidades". Se trata de una nueva muestra de la “falta de empatía de la actual concejalía de Derechos Sociales, encabezada por el señor Huertas”, señala la concejal de la coalición Elisa Cabrerizo, que exige soluciones a esta situación.

Hasta este grupo municipal llegan los casos de estas personas que, teniendo las instituciones conocimiento de que son Covid positivo, “no paran de dar tumbos entre centros sanitarios y organizaciones, para de nuevo tener que volver a la calle”, sostiene Cabrerizo, que explica “que esto es, en primer lugar, un atropello a los derechos humanos y también supone un peligro para la salud pública dada la gravedad de esta pandemia”.

La coalición propone que, ya que el Ayuntamiento no cumple con su obligación de buscar instalaciones (como albergues, hoteles u otros espacios), convenie con la delegación de Salud de la Junta en Granada espacios sanitarios propios, para que sirva así de control y tratamiento si es necesario. “Es perfectamente posible que se incluyan en el hospital Antiguo Clínico, que tiene varias plantas covid y cuenta con mucho más espacio libre, como ya han planteado los colectivos”, completa Cabrerizo.

“El concejal Huertas sigue haciendo oídos sordos a todas las reclamaciones en este sentido que le hacen llegar las organizaciones que defienden a las personas sin hogar, así como desde Podemos-IU”, continúa la concejal, que avisa de que “el tiempo sigue pasando y hay personas enfermas en la calle, cuando existen soluciones, aunque no tanto voluntad desde el Ayuntamiento”.

Las personas sin techo que son Covid positivos asintomáticos o de sintomatología leve “no tienen alternativas más que volver a la calle porque no hay recursos, ya que si piden una plaza en un albergue y tras realizarse la prueba resultan ser positivos, no pueden ingresar en él por lo que su única opción es pasar la enfermedad al raso”.

Cabrerizo recuerda al Ayuntamiento de Granada que este “maltrato” no solamente es “inmoral”, también contraviene la propia normativa de salud pública, tanto la general como la andaluza, que sostienen que por motivos de prevención, “se debe habilitar instalaciones alternativas para aislamiento domiciliario de personas sintomáticas, sin criterio de hospitalización y asintomáticas, que no dispongan de su propio domicilio, como por ejemplo turistas o transeúntes”.