Los precios de la cesta de la compra vuelven a subir. Tras la ligerísima reducción que experimentaron hace un mes, espoleados sobre todo por las rebajas, las materias primas y servicios están de nuevo más caras. Concretamente un 0,1% más caras pese a que los descuentos se han mantenido durante febrero. Comparándolo con los datos de los últimos meses, parecía que la tendencia a la subida iba a descender, pero ha resultado ser todo lo contrario.

A esto se le suma además que los costes de los bienes están, en general, más caros que hace un año. Concretamente un 3,1% más caro. De febrero de 2023 a febrero de 2024 la comparación es alcista en el apartado interanual, aunque siete décimas más baja comparada con el barómetro interanual de enero (3,8%).

Esta es la principal conclusión que se extrae este jueves del nuevo dato definitivo del Índice de Precios de Consumo (IPC) del mes de febrero de 2024, que ha publicado el Instituto Nacional de Estadística (INE). 

Todo está más caro que hace un año, y además la tendencia de subida que parecía haberse frenado ha cambiado en este mes nuevamente. De noviembre a diciembre, el encarecimiento de los bienes fue de un 0,1%, y de diciembre a enero se había revertido la tendencia con una reducción de los precios del -0,1%. Pero de enero a febrero esta tendencia ha vuelto a romperse y ha quedado en algo casi anecdótico con una nueva subida. Cierto es que el incremento es de una única décima, pero vuelve la tendencia al alza

En los últimos 30 días destaca la subida de precios en las bebidas alcohólicas y tabaco (un 3%), seguido del incremento en el precio de vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles (2,1%). Por otra parte, y como era esperado por la época, ha bajado el precio en ropa y calzado motivada por las rebajas (-14,8%) y en el apartado de muebles, artículos del hogar y artículos para el mantenimiento corriente del hogar, también beneficiado por los descuentos de la época (-1,4%).

Pero pese a la gran reducción de los precios de la ropa y menaje, esto no ha sido suficiente para situar la media de crecimiento del IPC en negativo.

Respecto a la variación anual de como acabó febrero de 2023 a como ha acabado febrero de 2024, el IPC destaca la subida anual de precios en restaurantes y hoteles, con un incremento en sólo 12 meses del apartado de 6,3%; y en alimentos y bebidas no alcohólicas (5,2%). Mientras, ha bajado únicamente el precio de la vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles (-1,9%). La única subida menos acentuada fue la del precio del transporte, con un 0,5% más.

En términos mensuales, la inflación en Andalucía aumentó un 0,3%, dos décimas por encima del crecimiento experimentado en la provincia granadina, mientras que en lo que va de año la subida llega al 0,4% en la comunidad. En Granada, esta tasa es del 0% en 2024, ya que a la subida de este mes hay que restarle la reducción de enero.

Valoraciones

Tras la publicación de estos datos, el Secretario General de UGT Granada, Luis Miguel Gutiérrez, considera imprescindible que la mejora de la inflación se consolide "para revertir las graves consecuencias de la crisis inflacionista que hemos atravesado, cuyo impacto sigue presente en los hogares granadinos, lo cual guarda relación, entre otros motivos, con el intenso encarecimiento del precio de los alimentos".

En este contexto, el representante sindical denuncia que las empresas siguen ampliando sus beneficios, con una desproporcionada elevación de los márgenes empresariales, generando una enorme presión sobre el precio de algunos productos. "Poner tope a los mismos, especialmente en algunos sectores, es un eje fundamental para garantizar unos precios más justos y asequibles para la clase trabajadora", ha afirmado Gutiérrez.

Además, el sindicalista manifiesta la necesidad de seguir impulsando el empleo y el crecimiento de los salarios, combatiendo con ello la desigualdad y la pobreza. 

Para CCOO, tal y como ha explicado el secretario provincial, Daniel Mesa, los datos este mes revelan una tendencia “peligrosa”, ya que, en su opinión “si está bajando el precio de la energía y se ha moderado por fin el precio de los alimentos, no es de recibo el desproporcional aumento de los precios que sufren las familias granadinas en el sector de la Hostelería”.

En este sentido, el responsable sindical se ha mostrado contundente al entender que “lo que aquí está pasando es que las subidas salariales pactadas en Convenio Colectivo, los empresarios la están repercutiendo directamente en los precios de consumo para mantener sus altos márgenes de beneficios sin atajar la precariedad”, ha explicado Mesa.

Un factor que, además, según Mesa pone de relieve el fenómeno conocido como “turistificación” que no es otra cosa que contar en nuestra provincia con un sector de la Hostelería orientado exclusivamente a los y las turistas, con precios desorbitados y discriminatorios, con el perjuicio que ello conlleva para las familias trabajadoras granadinas.