La primavera la sangra altera, pero también los hábitos alimenticios. Con la llegada del buen tiempo, el uso de una ropa más ligera y los primeros rayos de sol son muchas las personas que deciden ponerse a dieta, o hacer la llamada operación bikini para perder unos kilos de cara al verano. Sin embargo, los expertos piden en estas fechas extremar la precaución pues por muchas promesas que vendan falsos dietistas y páginas web, las dietas milagro, no funcionan y son tremendamente peligrosas.

Así lo reconoce el nutricionista, Pedro Cuenca, que aconseja tener especial precaución ante toda esa gama de dietas que prometen adelgazar mucho peso en pocos días. "La gente cree que perder peso es reducir los kilos que se reflejan en una báscula y no es así. Cuando se hace una dieta de estas características el cuerpo pierde músculo y líquidos, por lo que nos encontramos ante un falso adelgazamiento", remarca.

Una de las principales señales de alarma que a juicio de Cuenca deben alertar a quienes deciden adelgazar es la prohibición de prácticamente todos los alimentos. "Si por ejemplo la dieta dice que tienes que comer durante tres días piña y líquidos, la pregunta que uno tiene que hacerse es ¿comería yo solo este alimento toda mi vida? si la respuesta es no, ya sabemos que se trata de una dieta insalubre.

En este sentido Cuenca, que es diplomado en Nutrición y dietética por la Universidad de Granada (UGR), explica que este tipo de regímenes comprenden, en muchos casos, el primer paso para padecer un trastorno alimenticio como la anorexia o la bulimia con graves consecuencias.

A su juicio, lo ideal si se quiere perder peso es ir a un especialista, teniendo especial cuidado con el intrusismo que entraña esta profesión, pues según Cuenca "no todos los que dicen ser expertos tienen una formación acorde que así lo acredite".

El nutricionista se encargará de hacer un estudio detallado en función del peso y la edad para determinar qué alimentos serán idóneos según su constitución. Eso sí, lo que Cuenca tiene claro es la importancia de realizar cinco comidas diarias, incorporar frutas y verduras a la dieta y no abusar de la carne, pues el proceso de digestión de estos alimentos supone un esfuerzo mayor por parte del organismo. Por ejemplo, para digerir una comida densa con bastantes carnes, el organismo utiliza incluso el calcio de los huesos o el esfuerzo de algunos órganos lo que favorece el desgaste general, en el caso de que se haga de forma abusiva. También critica la obsesión por perder los líquidos, a base de tomar infusiones y productos especiales, pues no existe tal retención sino que el cuerpo, en sí mismo, está formado por un 70-80% de agua, que no es ni mucha ni poca, sino la suficiente para vivir.

En una ciudad como Granada donde parte de las relaciones sociales se desarrollan en los bares y restaurantes hacer una dieta equilibrada puede ser un suplicio. Sin embargo, para esto, Cuenca tiene buenas noticias. Por un lado, el nutricionista explica que como todo, si no se hace en exceso no tiene por qué ser malo. De hecho, en los bares se puede elegir la tapa por lo que siempre se puede optar por la opción más saludable.

"Cinco comidas al día por siete días de la semana son 75 en total. Si por ejemplo hacemos dos cenas en el bar, la proporción es mínima", remarca Cuenca, que piensa que lo principal para seguir una dieta adecuada es no privarse de todo, pues si no las personas se desmotivan y acaban haciéndolo mal. La descompensación en este caso, sería el peor enemigo. "Si por ejemplo comes mucho a medio día y luego no vuelves a hacerlo en todo el día, lo que estás haciendo va en contra de tu salud".

Por último, el experto recuerda la importancia de realizar una actividad física que ayuda a prevenir numerosas enfermedades del corazón, o incluso del cáncer. Salir a correr, o a andar son algunas de las tareas diarias que todos pueden marcarse cada día como objetivo. No valen excusas como el tiempo, pues siempre se puede ir andando al trabajo y con esto y una dieta saludable, siempre se gana más de lo que se pierde.