El primer fin de semana de movilidad entre las provincias de Andalucía después de tres meses y medio y el aluvión de desplazamientos que se esperan han obligado a las fuerzas de seguridad a reforzar los controles, sobre todo con las zonas fronterizas con otras comunidades donde la salida no está permitida salvo motivo justificado. En el caso de Granada, se prestará atención en el límite con la Comunidad de Murcia, en el norte de la provincia. También se mantendrá especial vigilancia en la capital ante la expectativa de recibir muchos visitantes con motivo de la festividad del Día de la Cruz, que pese a no celebrarse, atraerá a muchos andaluces.

En la Subdelegación del Gobierno en Granada han detallado que las labores de la Guardia Civil irán encaminadas principalmente al control de la movilidad en los pueblos confinados por tener tasas medias por encima de los 500 casos por cada 100.000 habitantes (son 36 en toda la provincia, algunos tan importantes como Santa Fe o Loja), además de en el límite autonómico con la Región de Murcia. Los agentes del Instituto Armado, como viene siendo habitual desde hace más de un año, colaborarán para el cumplimiento del resto de medidas en vigor contra el Covid-19, como es el buen uso de la mascarilla o el mantenimiento de los aforos estipulados en los establecimientos.

En cuanto a la Policía Nacional, a sus agentes les corresponden los controles en la estación de Renfe, y en las estaciones de autobuses, encaminados desde este fin de semana a que los viajes fuera de Andalucía estén justificados. Colaboran igualmente con los cuerpos policiales locales en tareas relativas a botellones, fiestas en pisos, o cumplimiento de aforos u horarios de cierre de bares, así como del toque de queda.

Por su parte, en declaraciones a los periodistas, el concejal de Protección Ciudadana y Movilidad del Ayuntamiento de Granada, César Díaz, señaló ayer que la Policía Local seguirá, como cada fin de semana en los últimos meses, tratando de "cubrir los principales emplazamientos de afluencia de jóvenes y no tan jóvenes".

Con los nuevos horarios de apertura de la hostelería y, "sobre todo", con las posibilidades que abre la apertura de la movilidad interprovincial, "estamos convencidos de que harán que hayan muchos desplazamientos a Granada para disfrutar del tardeo" y en general de la ciudad, ha explicado Díaz, que agregó que esto es positivo para que "se recupere esa maltrecha economía" de comercio y hostelería si bien hace necesario insistir en el llamamiento a la "responsabilidad individual".

"No podemos pretender tener un policía que vigile a cada uno", declaró el edil de Protección Ciudadana, que asimismo pidió no perder "el respeto al virus" y a la normativa para frenar su expansión pues sigue habiendo "muchos muertos" y "contagios" ante lo que sigue trabajando también el dispositivo especial de la Junta para la vacunación. "Pero el peligro sigue estando ahí", concluyó.