EL TSJA confirma la sentencia del asesino del exconcejal de Granada Castillo Higueras

El alto tribunal rechaza el recurso presentado por la defensa y da el visto bueno a la sentencia

"Castillo Higueras me debía dinero", el acusado del crimen al exconcejal granadino asegura que nunca quiso matarlo

Yassine B. durante el juicio en el que fue declarado culpable a principios de año.
Yassine B. durante el juicio en el que fue declarado culpable a principios de año. / Antonio L. Juárez / GPMedia

El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ha confirmado la sentencia que condenó a 24 años de cárcel a Yassine B., unico acusado del robo y asesinato del exconcejal socialista de Granada José Miguel Castillo Higueras, al desestimar el recurso de apelación formulado por la defensa del procesado, que se basaría en cinco motivos "de exposicion farragosa y reiterativa", reconoce el alto tribunal, que puntualiza que resultaron aclaradas con la intervención oral del pasado día 4. Contra esta decisión cabe recurso de casación ante la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo.

En síntesis, continúa el fallo, al que ha tenido acceso este periódico, el recurso se organiza en dos cuestiones: por un lado, la ruptura de la cadena de custodía de las imágenes de seguridad que grabaron lo ocurrido, tema que ya se trató en la primera sesión del juicio; y, por otro, si se trata realmente un asesinato o un homicidio imprudente como sostiene la defensa.

En el primer caso, el tribunal entiende que no hay ruptura de la cadena de custodia y que el CD con las imágenes de las cámaras de seguridad fue custodiado policialmente "con total seguridad" y expuesto en el día del jucio, algo que "no discute la defensa" que centra su recurso en la filtración de las imagenes "como resultado de una copia del original". Esto también es descartado por el TSJA, considerando que una "indebida filtración" no vicia de nulidad dicha prueba.

En el segundo punto, la defensa argumenta que el acusado "no tenía intención de matar, sino sólo de lesionar", argumentando que no exste prueba alguna que indique que el acusado quisiera acabar con la vida del exconcejal. El tribunal considera que lo ocurrido puede ser constitutivo de un delito de lesiones dolosas en concurso con un homicidio imprudente -en lugar de asesinato- y de robo con violencia con el atenuante de arrebato, como planteaba la defensa en su recurso.

Por todo ello, desestima el recurso de apelación y confirma, en todos sus pronunciamientos, la sentencia dictada en su día por la Audiencia de Granada tras el juicio celebrado con jurado popular, que emitió veredicto de culpabilidad. La sentencia ahora confirmada condenó al joven acusado a cuatro años de prisión por dos delitos de robo con violencia y a otros 20 de cárcel por un delito de asesinato, además de a 10 años de libertad vigilada.

Los hechos se remontan a la mañana del 23 de enero de 2022, cuando el exconcejal salió de su casa como hacía habitualmente y se cruzó con el condenado, que le golpeó en la cara para robarle, lo que le hizo caer al suelo.

El hombre fue auxiliado por varios ciudadanos, incluido el acusado, que dejó las cosas que había robado en la acera cercana. Cuando Castillo Higueras fue levantado del suelo, siguió su marcha aturdido por el golpe, sin reconocer al agresor y sin sus cosas.

El condenado volvió entonces a perseguirle, según recogieron las cámaras de seguridad de la calle y, tras un "seguimiento férreo" durante media hora, le propinó un fuerte golpe en la cara que provocó la caída fulminante de la víctima, momento que aprovechó para robarle.

Durante el juicio, el condenado negó haber asesinado a la víctima, aseguró que se acercó a él para prestarle ayuda porque creyó que iba borracho y que además le debía dinero.

La Fiscalía y la acusación particular habían solicitado una condena a prisión permanente revisable por el asesinato y cuatro años de prisión por los robos.

La defensa del acusado, por su parte, interpretó que los hechos eran constitutivos de un delito de lesiones dolosas en concurso con un homicidio imprudente y un delito de robo con violencia con el atenuante de arrebato.

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