La Universidad de Granada no prevé vender inmuebles en 2026

La Universidad de Granada ha aprobado en estos días sus cuentas para el ejercicio 2026. Unas cuentas paradójicas, según el rector, Pedro Mercado, ya que crecen debido a las obligaciones en cuestión de salarios, y a la vez suponen recortes en gastos corrientes para centros y Vicerrectorados por la necesidad de cuadrar números.

Según el apartado de ingresos previstos para la UGR, para 2026 no se prevé ninguna venta de inmuebles para el próximo ejercicio. La partida de enajenación de inversiones reales (capítulo 6) caerá con respecto a 2025 de 1,6 millones a apenas 200.000 euros. "Esta reducción se explica principalmente porque en 2025 se realizó la venta de un inmueble propiedad de la Universidad, operación excepcional que no se espera que se repita durante el próximo ejercicio", señala el presupuesto.

La venta a la que se refiere fue la de los derechos urbanísticos de una parcela de la que era titular la Universidad en Camino de Ronda. Además de 1,5 millones de euros, la UGR consiguió un terreno en la zona donde prevé construir un centro de investigación y transferencia que permita paliar los problemas de espacio de algunos centros del campus de Fuentenueva.

El Capítulo 3, bautizado como Tasas, Precios Públicos y Otros Ingresos, pasa de una consignación presupuestaria de 70, 6 millones en 2025 a la cifra de 71 millones para el ejercicio económico 2026, un incremento del 0,50% entre los dos ejercicios. Según el documento, este crecimiento se sustenta, fundamentalmente, en la actualización de "diversos precios públicos y tarifas por prestación de servicios que se encontraban desactualizados y no reflejaban el coste real del servicio en distintas unidades".

Especialmente se señala lo relativo a alojamientos en residencias universitarias y colegios mayores. Asimismo, se han incrementado las tasas por emisión de certificaciones, el precio de los comedores y se comenzará a cobrar con la emisión de la tarjeta universitaria, entre otros conceptos según se recoge en el documento ya aprobado. También se han visto incrementados los precios de los cursos de la Casa de Porras o de la matrícula del Aula Permanente de Formación Abierta.

El total de ingresos de la institución se estima en 636 millones, la misma cantidad que se espera gastar en próximo año en la institución académica granadina. En gastos, la cuantía más abultada corresponde a gastos de personal, con 426,7 millones de euros.

En las cuentas se reconoce que la UGR cuenta en la actualidad "de un remanente de tesorería no afectado prácticamente inexistente", lo que en la práctica, apunta el texto, supone que la UGR no ha podido participar "de forma significativa" en el plan extraordinario de infraestructuras promovido por la Junta para el periodo 2024-2027 y que se financia, precisamente, con los remanentes de las universidades.

Sin embargo, se acometerán con recursos propios obras que resultan de urgencia para el Rectorado, como la ampliación de Informática, las obras en el Instituto del Agua, Ciencias o Derecho, que lleva más de un año con andamios que sostienen el patio Padre Suárez. Esas intervenciones "inaplazables" se unirán a intervenciones que han conseguido financiación externa, como la piscina de Fuentenueva que asume la Consejería de Fomento, o la Azucarera, que corre a cuenta del Ministerio de Vivienda.