La 'guerra fría' entre los taxis y Uber en Granada ha empezado a subir de temperatura. La Policía Nacional confirmó a esta redacción que durante la tarde del pasado sábado se registraron dos denuncias por daños provocados a vehículos, sin que el Cuerpo aportara más datos.

Estas dos se unirían a otra serie de agresiones de las que tuvo constancia la Policía Local de Granada y que acaecieron a primera hora de la mañana de ayer en la Carretera de Málaga y frente al centro comercial Neptuno, en las que los coches de Uber sufrieron la rotura de varias lunas con bates de béisbol. Uber, a media tarde de ayer, y tras más de doce horas desde que se produjeron estos ataques, no tenía todavía constancia de estas agresiones.

Estas serie de ataques se corresponden con la cifra dada por Fermín Ruiz, representante en Granada de la patronal de las VTC Unauto Andalucía, que tienen constancia de "cuatro ataques, además de otros tres coches de Uber que fueron "pintados con spray. Estos coches llevan cámaras de seguridad internas, según explicó Ruiz a este periódico, por lo que esperan que a través de ellas se pueda identificar a los agresores ya que graban a un radio de "300 metros.

La Policía Nacional sólo pudo confirmar el extremo que durante la tarde del sábado, en un intervalo de dos horas comprendido entre las 19:00 y las 21:00 se registraron dos denuncias por daños en vehículos, pero que no habían recibido ninguna de las supuestas agresiones acaecidas durante la madrugada del domingo.

Es la Policía Local quien sí tiene constancia de las mismas. Una se produjo sobre las 6:30 horas junto a la parada de taxis del centro comercial Neptuno, cuando a un conductor de Uber, que al parecer esperaba a unos clientes, le rompieron la "luna trasera y lateral derecha de su vehículo. El conductor llamó de inmediato a la Policía Local, pero "entre el nerviosismo no tomó la matrícula del agresor, presuntamente un taxista, informaron fuentes de Cuerpo. Otra supuesta agresión tuvo lugar en las inmediaciones de la Antigua Carretera de Málaga.

Ramón Alcaraz, presidente de la Gremial del Taxi de Granada afirmó que comprobarán si es uno de sus asociados con la matrícula que tiene la Policía, pero insiste en que las agresiones son un "montaje porque "no nos cuadran". Sobre el incidente de Neptuno, a Alcaraz le extraña que una parada concurrida como la de la acera de la Mae West a esas horas "ningún compañero taxista haya dicho nada, y que lo que estos le trasladaron es que se trató de la reacción de unos clientes de Uber que "estaban descontentos con el precio del servicio.

Con respecto a la agresión en La Chana, el presidente de la Gremial se pregunta cómo "emerge un encapuchado con un bate de béisbol y se identifica en que es taxista. "Es que canta", sentencia.

Alcaraz se congratula de haber "calmado a los taxistas de su asociación, pero lamenta que "nos quieran echar esto encima".

Uber empezó a funcionar en Granada la pasada semana.