Carlos Neva celebrando un gol anotado en Albacete.
Carlos Neva celebrando un gol anotado en Albacete. / Granada CF

El último superviviente del Granada CF que jugó en Europa, Carlos Neva, ya es historia en el club rojiblanco. Del que fuera capitán los dos últimos años ya se conocía que no iba a seguir en la plantilla de la próxima temporada. De hecho el club, en un comunicado oficial, lo despidió al margen del resto de futbolistas que cumplieron contrato esta pasada campaña.

El gaditano quiso despedirse de la afición, pero no desaprovechó la ocasión de lanzar un dardo a los máximos responsables del club. “Una carta no era la forma que ambos merecíamos de despedirnos, pero no me han dejado hacerlo de otra manera”, indicó en su misiva.

Neva comenzó su escrito indicando que “el día que llegué a Granada jamás pensé que esta ciudad y este club se convertirían en lo que hoy son para mí. Llegué siendo un niño con ilusiones, con sueños por cumplir y unas expectativas que con el tiempo se superaron con creces”. El defensor nacido en el Puerto de Santa María resaltó que “por el camino quedan personas que han marcado mi vida, partidos que quedarán grabados en la historia de este club y momentos que me emocionan recordar”.

Pero, para lamento del ya exjugador del Granada CF, “por suerte o por desgracia, la vida son ciclos y ser consciente de que todo acaba hace que lo vivas todo con más pasión”. Por último, quiso reflejar que “podré decir con orgullo que soy del Granada CF y que Granada es mi casa. Allá donde vaya te llevaré conmigo. Gracias y eterna lucha”, concluyó.

El lateral zurdo llegó a la entidad en la temporada 2017-2018 procedente del Marbella para militar durante dos campañas en el Recreativo Granada en Segunda División B. En el último partido del curso 2018-2019 debutó con el primer equipo rojiblanco ante el Alcorcón en Segunda División con el ascenso en la mano. Con el Granada CF en Primera pasó a ser parte de forma definitiva del plantel, en el que ha permanecido seis temporadas con dos descensos y un ascenso.

Además, fue pieza fundamental en la UEFA Europa League durante la 2020-2021. Una grave lesión de rodilla le cortó su trayectoria, pero volvió a jugar y a ser casi siempre un fijo para los numerosos entrenadores que han pasado por el banquillo rojiblanco. En total, ha jugado 177 partidos, 168 de ellos como titular, siendo el sexto jugador con la cifra más alta de compromisos disputados en el siglo XXI. De ellos, 157 fueron en liga, 13 en Europa League y 7 en Copa del Rey, en los que estuvo en el césped 14.679 minutos, viendo 15 amarilla y tan sólo una cartulina roja, curiosamente en su último encuentro en El Sardinero ante el Racing de Santander antes del descanso. A todo ello, hay que sumar otros 55 encuentros con el filial, sea bajo la nomenclatura de Granada B o Recreativo Granada.

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