El delantero del Granada CF Jorge Molina ha dicho adiós a la presente temporada tras romperse el ligamento cruzado anterior de su pierna izquierda. El de Alcoy fue sustiuido por Weissman en el minuto 54 tras caer en el área en una acción en la que buscó un remate pero su rodilla hizo un mal gesto. Tras ser atendido por el médico y uno de los fisioterapeutas del club, finalmente tuvo que ser cambiado pero pocos esperaban que finalmente el diagnóstico fuera tan grave.

Molina, uno de los jugadores más queridos por la afición rojiblanca, que se quedó en el equipo tras fallar el penalti que pudo darle la pasada temporada la permanencia en Primera División, está a punto de cumplir 41 años y esta lesión tan grave podría adelantar su retirada de los terrenos de juego. Aunque el club no aclaró el proceso de recuperación a seguir ni el tiempo de baja, lo normal es que el veterano futbolista tenga que pasar por el quirófano para ser operado por esta lesión y esté, al menos, entre seis y ocho meses de baja.

Sin apenas lesiones

El ariete regresó ante la Ponferradina a la titularidad tras varias jornadas sin actuar de inicio después de su gran actuación en el choque anterior contra el Burgos, en el que marcó dos goles y dio una asistencia en el triunfo de su equipo por 1-3. Se trata de uno de los futbolistas más veteranos del balompié profesional en España y en las últimas campañas ha batido varios récords de longevidad goleadora con el equipo andaluz.

Esta rotura de ligamentos de rodilla es la primera gran lesión que sufre en su larga carrera, un futbolista que apenas se ha perdido partidos por problemas físicos en los tres años que lleva en el Granada CF.