Pacheta junto a Chema Monzón en el banquillo de Zorrilla.
Pacheta junto a Chema Monzón en el banquillo de Zorrilla. / Agencia LOF

Cinco derrotas, otros tantos empates y tan solo dos victorias en las primeras doce jornadas, dejan claro que el Granada CF va a sufrir esta temporada para lograr la permanencia salvo giro inesperado, o que los refuerzos del mercado invernal, si es que llegan, le cambien la cara al equipo. Los rojiblancos tenían ante el Real Valladolid la posibilidad de salir de los puestos de descenso, pero no lo lograron.

En Zorrilla, tras una buena primera mitad, acusaron falta de personalidad y ese miedo que da perder el botín obtenido cuando te encuentras en una zona peligrosa. El cuadro de Pacheta se dejó remontar y sigue anclado en descenso. Solo una jornada ha estado fuera de ella. No se perdía desde la cita ante el Leganés en Los Cármenes el 14 de septiembre, pero es que desde ese día únicamente ha ganado dos partidos. Y de puntito a puntito los objetivos son muy difíciles de alcanzar.

El discurso

El técnico burgalés no deja de insistir en sus comparecencias que le gusta lo que ve, que ese es el camino y que no le importa ahora mismo la clasificación. Pero si le pregunta a cualquier aficionado, lo mismo no piensa igual. Van pasando las jornadas y el equipo rojiblanco no termina de despegarse de los puestos que suponen el descenso a Primera RFEF. Pacheta verá todo idílico, pero los seguidores quieren ver ganar a su equipo ya, y las victorias no llegan.

El goleador

Entre los aspectos en los que ha incidido el técnico del Granada CF es que Jorge Pascual terminará marcando goles. Ya lo hizo en Copa del Rey, donde al fin vio puerta con un doblete ante el CD Roda, y en Zorrilla estrenó su casillero goleador en liga abriendo el marcador. Antes anotó otro pero fue anulado por fuera de juego previo de Faye. Dos tantos en menos de una semana que parecen haberle dado esa confianza que necesitaba. En Pucela cuajó un buen partido y pudo ser objeto de penalti por un leve toque de un defensor. Sin embargo, aunque ante los medios de comunicación señaló que a él no le habían sacado amarilla, no fue así y el colegiado sí lo amonestó por dejarse caer en el área. Es un ejemplo de la falta de concentración de los futbolistas en determinadas fases de un partido. No saber que te han amonestado cuando sí lo has sido demuestra la falta de oficio que tienen muchos componentes del plantel.

Hongla

Lo del camerunés es caso aparte. Es evidente que algo, a nivel interno, ha sucedido. Fue descartado para el choque de Copa cuando el míster anunció que jugarían los que menos minutos estaban teniendo. Cuestionado por su ausencia se limitó a decir que no viajó “por decisión técnica”. Y en la previa, cuando fue preguntado de nuevo por él, dejó claro que no quiere hablar más de Hongla y que es uno más en la plantilla. Lo es numéricamente, pero salvo que se le caigan varios centrocampistas, va a tener complicado volver a jugar antes de que salga cuando se abra el mercado de fichajes, si es que consigue la comisión deportiva deshacerse de él, que tampoco está muy por la labor de revertir su situación. Ahora mismo tiene por delante a Rubén Alcaraz, Sergio Ruiz, Pedro Alemañ, Luka Gagnidze y hasta Manu Trigueros. Ni está ni se le espera.

Una final

El próximo domingo el Granada CF recibirá en Los Cármenes al Real Zaragoza. Una cita que puede considerarse como la primera final pese a ser la decimotercera jornada de competición. Los maños, en plena crisis, son colistas y solo han ganado un partido. Acumulan cinco derrotas consecutivas y caer de nuevo supondría hundirse en la tabla. No sumar los tres puntos teniendo en cuenta que tras el cuadro zaragozano los de Pacheta deberán visitar el líder, el Racing de Santander, puede generar de nuevo un ambiente enrarecido en las gradas.

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