Música

La OCG estrena el oratorio 'Las siete palabras de Cristo en la cruz', de César Franck en un homenaje a Isabel de Falla

Imagen de archivo de un concierto de la OCG

Imagen de archivo de un concierto de la OCG / Antonio L. Juárez / Photographerssports

Los evangelios de Mateo, Marcos, Lucas y Juan recogen las que fueron las últimas palabras de Jesucristo antes de morir crucificado (siendo, quizá, la más famosa esa que reza "Padre, perdónalos porque no saben lo que hacen") y que, como tantos otros fragmentos bíblicos, ha servido de fuente de inspiración para innumerables manifestaciones artísticas, incluyendo entre ellas Siete palabras de Cristo en la Cruz, del belga César Franck, que podrá escucharse por primera vez en Granada de la mano de la Orquesta Ciudad de Granada (OCG) y su coro, bajo la batuta de Víctor Pablo Pérez. 

Siguiendo la estructura evangélica, la obra de Franck estuvo oculta hasta casi un siglo después de su muerte, cuando fue descubierta en la Universidad de su Lieja natal. Se trata, por tanto, de una obra poco interpretada hasta la fecha y que aún permanece ajena al gran repertorio, pero cuya historia todavía desconcierta a los eruditos que deciden estudiarla. 

Junto a esta obra, la OCG y su Coro, representarán en el Auditorio Manuel de Falla obras de Igor Stravinsky, concretamente de su ballet Pulcinella, donde el ruso volvió a tomar como inspiración las obras de Mozart, Bach y sus contemporáneos, llegando a incluso a colaborar con artistas nacionales como Pablo Picasso.

Homenaje a Isabel de Falla

Como ya es tradición, el Auditorio Manuel de Falla acogerá este doble concierto, que tendrá lugar el viernes 11 y el sábado 12 de febrero, a las 19:30 horas. Sin embargo, en esta ocasión el concierto tendrá un componente emotivo, pues estará dedicado a la sobrina del compositor granadino, María Isabel de Falla, impulsora de la llegada de su legado a Granada. 

La sobrina y ahijada del intérprete, fallecida en Madrid el pasado viernes, se encargó de recoger toda la documentación de su tío (fotografías, partituras, epistolarios, grabaciones sonoras, libros, folletos, programas, recortes de prensa, facturas,...), conservándolas y ordenándolas en dos pisos de Madrid para, a partir de los años 60 comenzar los contactos para que el archivo pudiera estar ubicado en Granada.

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