Viaje al interior de los sentidos con Los Pilotos

Banin y Florent siempre han sido la parte más eléctronica de Los Planetas; el contrapunto perfecto a la voz oscura de J y a los golpes enérgicos a la batería de Eric, yendo en busca del mejor arreglo y de sonidos diferentes capaces de crear melodías únicas. De parte de esas búsquedas y de un apetito voraz por escuchar la música que se está haciendo en cualquier rincón del mundo surge Los Pilotos, un nuevo proyecto musical capaz de hacer que la electrónica suene orgánica y cálida y que está expandiéndose como la pólvora por internet.

Los Pilotos nació, como casi todas las cosas buenas, por casualidad. Las buenas sensaciones tras un life en Madrid en el que Florent participó tocando la guitarra y Banin los teclados sobre unas bases que habían compuesto previamente por separado fueron determinantes para darse cuenta de que Los Pilotos podían convertirse en algo grande. "La idea inicial del proyecto era bastante punky. Hicimos aquella actuación, que fue algo muy del momento, muy efímero, y que no tenía más intención que la de disfrutar de la sensación que te da liberarte de muchos corsés y de mucha historia que tiene un grupo hecho y derecho en España", apunta Florent.

A sabiendas de que de ese proyecto debía salir un disco y animados por Javier Liñán, se metieron en el estudio de Producciones Peligrosas con Carlos Díaz a los mandos para terminar de dar forma a los temas y darle sentido a su propuesta. "Al principio era una música todavía más abstracta de lo que es, no tenía casi forma, y era como un mantra que hacía falta conducir a alguna parte. Todo el tiempo que pasamos en el estudio estuvimos haciendo puesta en común de ideas, contando lo que nos sugería cada canción, lo que nos había inspirado a hacerla, y hablando de todas las sensaciones que nos provocaban", explica Banin. De hecho, de esa experiencia conjunta en el estudio nacieron dos nuevos temas, Caravana por el desierto y El clan del ruido.

El resto de sus canciones destilan luz y oscuridad a partes iguales. Su música remite a Dan Deacon o a Washed Out, aunque se desmarca de cualquier atmósfera que se haya podido escuchar antes. Los ritmos que nacen de la máquina se suavizan con la aportación orgánica de una batería o de una guitarra reinterpretando la base y se crecen con unas molodías finales en ocasiones adictivas y en ocasiones casi hipnóticas que se alcanzan dejando que la música fluya con libertad.

El concierto de esta noche en el Teatro Isabel la Católica que servirá para abrir el XVIII Festival Internacional de Jóvenes Realizadores de Granada estará muy ligado a la experiencia visual que hay tras la música de Los Pilotos. Así, durante el concierto se proyectarán en pantallas grandes el material visual que han creado especialmente para las canciones gente como Javier Longobardo, Rodolfo del colectivo Miga o Francis López. Y es que escuchar la música de Los Pilotos es como emprender un viaje. "Como sentarte a ver una película. Llegas y no sabes con qué te vas a encontrar; si te gusta te quedas, y si no te vas. Hacemos música con una idea abastracta, muy visual. No estamos ceñidos a la ortodoxia y nos encantaría encontrar una fórmula más arriesgada, donde la experimentación tenga más peso", añade Florent.

La música de Los Pilotos no deja de ir recibiendo por el momento piropos por parte de quien la escucha; de hecho, el resto de Los Planetas fueron de los primeros en acoger con buenas vibraciones la aventura musical de sus compañeros de banda. J contempló desde la línea de fuego la actuación 'piloto' que tuvieron en la sala Industrial Copera junto a After After Hours y "le encantó tanto el concepto del grupo como las canciones"; y Eric incluso ha colaborado a la batería en algunos temas del disco. La actuación de esta noche será la primera parada en una carrera que los dos Pilotos esperan que sea de fondo y que llegue hasta México -donde en breve se editará su álbum- y que recorra toda Europa, donde su propuesta tiene mucho que decir.