Una noche para el recuerdo: La OCG y Marina Heredia se unen en un canto por el pueblo gitano

El Palacio de Carlos V ha acogido este jueves uno de los espectáculos más singulares de la primera Bienal de Flamenco de Granada: tras el concierto inaugural del pasado viernes 5 de septiembre en la Plaza de Toros, la Orquesta Ciudad de Granada volvió a tocar, esta vez junto a Marina Heredia y el guitarrista José Quevedo Bolita. La propuesta había levantado pasiones: un espectáculo para conmemorar los 600 años de la llegada del Pueblo Gitano a España que ya había vendido todas sus entradas.

Con Joan Albert Amargós como compositor y bajo la batuta de José Trigueros, la noche unió a director, guitarrista y co-compositor, cantaora y orquesta en una propuesta que busca emocionar y reivindicar, con la libertad como eje central. El programa giró en torno al obra sinfónica ¡En Libertad! el camino de los gitanos, un encargo de la Orquesta Filarmónica de Duisburgo en colaboración con el Instituto Cervantes de Hamburgo que se estrenó en 2023.

¡En Libertad! llegaba a la primera Bienal de Flamenco de Granada en el marco único del Palacio de Carlos V como una clara reivindicación de la historia y costumbres del pueblo gitano. Para la ocasión, esta creación de dos músicos geniales había sido recientemente revisada y ampliada con temas que completan y enriquecen literaria y musicalmente la composición inicial y que ha sido plasmada en soporte discográfico.

Amargós, que lleva muchos años trabajando en el terreno creativo de la fusión entre la música clásica, el jazz y el flamenco, es el responsable de la música notada. La obra recorre, en forma de poema sinfónico, la memoria colectiva del pueblo gitano: desde su origen en Rajastán hasta la actualidad, subrayando valores como la libertad, el respeto a los mayores, la familia, la comida, el cante y el baile.

Marina Heredia

Esto es lo que pudo conocer de primera mano el público de esta primera Bienal. La voz Marina Heredia surgía de entre la orquesta con la letra las bases de ¡En Libertad! El camino de los gitanos. La granadina hizo alarde de los méritos que la han colocado como una de las voces más reconocidas del flamenco contemporáneo. Con una sólida trayectoria internacional, ha compartido escenario con figuras como Pepe Habichuela, Enrique Morente o Estrella Morente, y cuenta con una discografía consolidada que incluye títulos como La voz del agua (2007), Marina (2010), A mi tempo (2013) y Capricho (2021). En esta ocasión, su cante, profundamente enraizado en la tradición, aportó el tono emocional de la obra y conectó directamente con el público.

Además, la noche contó con la colaboración especial de Eva Yerbabuena, David Dorantes al piano; Jaime Heredia 'El Parrón', padre de la cantaora granadina; así como la voz de Ezequiel Montoya y Juan Fernández como narrador.

La velada en el Palacio de Carlos V en el marco de la I Bienal del Flamenco de Granada se distinguió por la combinación equilibrada entre la dimensión sinfónica en la primera mitad y tradición flamenca en la segunda, ofreciendo al público una mirada amplia sobre el recorrido cultural e histórico de la comunidad gitana.

Próximas citas

La programación en la Abadía continuará con Irene Morales este viernes 19 de septiembre, joven bailaora granadina; Argentina el 20, con su poderoso estilo que une pureza y contemporaneidad; Mayte Martín el 25, referente indiscutible de la sensibilidad flamenca; y Arcángel el 26, con su voz cristalina que simboliza la evolución del cante.

El 27 de septiembre se pondrá punto final a la Bienal con un espectáculo de creación del nuevo palo del flamenco, hecho para ser disfrutado sin prisa, la Sosegá, dirigido por Javier Limón, que reunirá a Carmen Linares, Sandra Carrasco, Antonio Cortés, Dani de Morón, Juan Carmona, Ane Carrasco, Saúl Quirós y José Maya. Será también una celebración de los 100 años de la cerveza Alhambra 1925, que ha querido regalar a Granada un nuevo palo flamenco como legado cultural.

La Bienal de Flamenco de Granada, que se celebrará en los años impares, nace con la voluntad de consolidarse como cita internacional de referencia, en diálogo con la Bienal de Sevilla. Este nuevo festival proyecta así este arte como seña de identidad de la ciudad.