Después de su éxito en Granada el año pasado, el cabaret The Hole regresó ayer con su segunda parte, en la que se propone recuperar el viejo género de la revista que ha ido desapareciendo, aunque con un "toque castizo, moderno y canalla". Una carpa instalada en el Rasillo, con cuarenta metros de diámetro y dieciséis de altura, permitió disfrutar de un montaje inédito en España, con números aéreos que no eran posibles por las limitaciones técnicas del Teatro La Latina de Madrid, donde se estrenó el espectáculo, según el productor y director artístico, Iñaki Fernández.

En la carpa de este año, con capacidad para 800 personas que podrán tomar copas y comer durante el espectáculo, actuarán dieciocho artistas, entre ellos la granadina Vinila Von Bismarck, y la novedad de la música en directo interpretada por una orquesta de tres mujeres.

"Quien no haya visto el primero, puede ver The Hole 2, porque se entiende perfectamente y se puede disfrutar", asegura el director artístico de una obra que ha llenado la ciudad con una campaña de publicidad provocativa con imágenes sugerentes". "Si te gustó el primer agujero, prueba con el segundo", es el eslogan de este montaje que, entre la primera y la segunda parte, ya suma más de un millar de representaciones por toda España con medio millón de espectadores con un espectáculo "hecho para España y por artistas españoles". "Hemos llegado a los niveles de ventas de los grandes musicales de Broadway y nos enorgullece enganchar así al público español. En España se pueden hacer cosas que llegan a este nivel, y es un momento para evadirse de los problemas, porque en crisis los cabarés siempre han estado de moda".