Una vida de miradas

José Lamarca (San Isidro, Buenos Aires, 1939) fue el único fotógrafo al que se permitió entrar a la boda de Camarón de la Isla con Dolores Montoya. No se limitó a captar a los novios. Su cámara registró escenas entrañables y curiosas, muy originales. Escenas, en definitiva, testimonio de una época. Gitanillos que reflejaban en sus caras la ilusión por el enlace, el momento del sí quiero, padrino y madrina nerviosos, la juventud y esplendor de los novios... No es extraño que casi medio siglo después, los seguidores y amantes de José Monge se emocionen e incluso lloren viendo estas imágenes que ahora desembarcan en el Centro Lorca.

La exposición José Lamarca. Un viaje hacia el flamenco nos pasea por la vida profesional del fotógrafo argentino, desde sus inicios como reportero gráfico de los movimientos sociales y obreros en Argentina y Chile hasta las entrañas del flamenco. Y recoge los retratos de personalidades como Aleixandre, Alberti, Gades, la Niña de la Puebla o Morente. Retratos de inquietante sobriedad, a la vez sencillos y complejos, todos en blanco y negro. Son cientos de anécdotas las que se esconden tras estas imágenes que derrochan dignidad y autenticidad. "El padre de Paco de Lucía quería controlar todas las fotos que yo le hacía a su hijo con Camarón. El llevaba hasta la ropa que debía ponerse y antes de que yo disparara se asomaba al objetivo y me decía: ahora. Cuando se marchaba era cuando sacábamos ropa más loca, parecida a la que llevaban los Beatles, y empezaba el juego de la sesión de fotos. Con el paso del tiempo ha sido cuando me he dado cuenta de la elegancia que desprenden esas fotografías", comentó ayer José Lamarca.

Conocer a Gades quizás marcó un antes y un después en su carrera profesional. De su mano inmortalizó los inicios del Ballet Nacional de España y el hermético mundo del flamenco se le abrió de par en par. Por su estudio de Malasaña desfilaban las grandes figuras del toque, el baile y el cante. Antonio Mairena, Carmen Linares, Vicente Amigo, la media sonrisa de Fernanda de Utrera. Y, además, las familias, clanes enteros como los Habichuela. Nadie se resistía a posar para él. "Recuerdo que Manuel de los Santos Pastor, Agujetas, tenía un carácter malísimo. Un día, después de una actuación, vi que trataba fatal a un fotógrafo japonés y ni siquiera me atreví a intentarlo yo. Cuando pasó un rato se me acerca y me dice: oye, que yo también quiero salir. Entonces lo retraté con un vaso en la mano y cara seria. Fue en 1989 en Jerez de la Frontera", comenta Lamarca.

Entre los 177 retratos en blanco y negro que componen la muestra no faltan escritores como Vicente Aleixandre, Octavio Paz o Marcos Ana. "Cuando le dieron el Nobel a Aleixandre nadie lo conocía, nadie sabía quién era. Y él se enfadaba porque se daba cuenta de que ningún periodista de los que lo entrevistaban lo había leído. Hasta que de repente llegó un periodista que sabía de Aleixandre más que él mismo. Estaba contentísimo y ese día hicimos las fotos".

La concejala de Cultura, María de Leyva definió a Lamarca como fotógrafo "de antigua escuela" por su encuadre de los personajes, revelado del negativo y positivado. La muestra, la más extensa de las que hasta ahora se han hecho del trabajo de Lamarca, con piezas procedentes de los fondos del Ministerio de Cultura se completa con audiciones de poemas de Lorca interpretados por diferentes artistas. Paralelamente a la exposición, tendrá lugar un concierto de Carmen Linares, el jueves 22 de diciembre, y un espectáculo de la bailaora granadina Patricia Guerrero, donde hará un especial guiño a la obra de Federico García Lorca. Además, el propio José Lamarca llevará a cabo una visita guiada a la exposición, con una posterior charla coloquio, este sábado 17 de diciembre. Una experiencia que será inolvidable para los amantes de la belleza, la autenticidad y la elegancia.

Escenas míticas.Sobre estas líneas, José Lamarca ante una de sus fotos y en un momento de la presentación de la exposición, ayer en el Centro Lorca con la asistencia de la concejala María de Leyva.