LO estamos viendo semana sí, semana también: cualquier equipo que es capaz de hacerse dueño del balón, practica y elabora un buen fútbol, si bien es verdad que muy pocos equipos tienen pegada arriba, pero disfrutan con el elemento básico de este juego, el balón.

Muchos, previsiblemente, pueden pensar que puntuar en Granada es mas que complicado. Desinhibirse de la presión también puede motivar a hacer más con el balón, pero, realmente, casi todos los equipos que han venido a Granada se han asociado. Pocos o muy pocos han venido a encerrarse atrás y jugar un fútbol directo y rácano. Por el contrario, esta semana vimos un equipo que no dio un mal pelotazo. Aun perdiendo, su portero jugaba con la defensa. ¿Ustedes creen que este Granada CF no puede hacer lo mismo? Yo no me lo creo. Este equipo es capaz de eso y de más. ¿Por qué no lo hacen? Si yo lo supiera... El aficionado es cada día más exigente, porque ve que puede ser el año en el que se culmine un ascenso a una categoría que, como mínimo, la ciudad merece estar.

El míster está haciendo hincapié en que el equipo juegue mejor, pero para ello hay que tener el balón. Realmente, cuando el equipo hace mucho daño -y se vio el domingo- es cuando ejerce una presión en el medio y su robo proporciona contras que son mortales. Cosa curiosa, que al equipo visitante se le coja en contraataques; pero, además, casi siempre el Granada CF se pone por delante en el marcador. Más razón para que el equipo insista en manejar mejor el balón, en asociarse, en tener paciencia para llegar a la otra portería. La apuesta de esta equipo, ya lo sabemos, es ascender, pero si jugara mejor no especularíamos con lo que nos espera para el final.

Volvemos a pasar por condicionas extras en cuanto a instalaciones. El césped será diferente, es de moqueta y no de última generación, por lo que será difícil de manejarse, el balón viajará muy rápido y los controles, exigentes. Será necesaria concentración al máximo desde el principio. Si las condiciones climatológicas son de agua, habrá que tomar decisiones más rápido, y, por supuesto, elegir a los jugadores más idóneos para estas características. Para mí es vital el encuentro. Hay que ganar o ganar, apostar por jugar y por ser líderes, que puede que sea lo más importante.