En casos de corrupción política, no basta con pedir perdón

Definitivamente la corrupción ha aparecido en el entorno del Gobierno. Hasta hace poco, el mensaje transmitido es que los casos que están en la palestra provienen de bulos propagados, investigados y instruidos por pseudoperistas, UCO y jueces, respectivamente, instalados en la fachosfera. El hecho de que estén procesados ya el hermano del presidente y el fiscal general del Estado (del Gobierno) apenas ha producido efectos en las llamadas responsabilidades políticas. Y así se navegaba en el poder con la premisa de que todo es mentira hasta que ha saltado por los aires el denominado caso Koldo tras conocerse el informe de la UCO. Con la implicación presunta de Santos Cerdán, la secretaria general del PSOE-A, María Jesús Montero, se ha abrasado las manos y hasta el presidente del Gobierno ha pedido perdón. Por las implicaciones del caso Koldo en Granada también se ha disculpado el secretario general de PSOE en la provincia, Pedro Fernández. Pero nadie asume responsabilidades. En política pedir perdón no basta, tal como dicen todos los políticos cuando las corruptelas se dan en la acera de enfrente.