EEUU, una armería ‘after hours’

23 de junio 2025 - 03:08

El Gobierno de EEUU trabaja con varios formatos antipersona; unas veces, como ahora con Irán, tira del formato “nosotros mismos matamos a los que nos incordian” y, en otras, se vale de sicarios (“¡Netanyahu, mátalos!”), para eliminar sin filtros a poblaciones enteras en nombre de la democracia o, más bien, en defensa de sus intereses comerciales o estratégicos. Así, en Chile (1973), Filipinas (1965), Nicaragua (apoyo a Somoza), Indonesia (1967), Arabia Saudita (ahora), Irán (con el Sha), Zaire (con Mobutu), Guatemala (desde 1954), Honduras (desde 2009). El formato ‘eliminación por encargo’ recuerda las pintadas que en los 80, sobre todo, aparecieron en las paredes de Euskadi con el lema “¡Eta, mátalos!”. Es quizá el formato de menor riesgo. Últimamente, proliferan en las redes invitaciones anónimas semejantes para acabar con Pedro Sánchez, sin mancharse las manos. El encargo es para un verdugo que ejecute al presidente por gusto o por vesania. Para Pedro Sánchez, desde la impunidad que ofrece el anonimato, se pide la hoguera, la guillotina, el desmembramiento, la emasculación, el ahorcamiento, el gaseamiento, el despellejamiento o la trituración. Las películas USA han hecho circular la idea de que decisiones tan drásticas, como la del ataque a Irán, se toman en la inteligente, superinformada y reflexiva Ala Oeste de la Casablanca. Lo que busca el buen pueblo americano y sus gobernantes, según esos films, es el bien de la humanidad entera. Los EEUU son los buenos y sus enemigos los malos, sin paliativos. ¡Obra maestra de la propaganda! Trump no es peor presidente que Nixon, Kennedy o Carter, simplemente, es menos taimado, no trata de convencernos, y esto es de agradecer, de que lo que le interesa a él (y lo que piensa que le interesa a su país) es lo que interesa a la ‘gente de bien’ del mundo entero. Hasta nos convencieron de que las bombas atómicas que acabaron con 250.000 vidas en Hiroshima y Nagasaki fueron la forma más humanitaria de acabar con la guerra. ¡Nos han llegado tantas cosas buenas de ese país que nos negamos a aceptar que Trump lo ha convertido en una armería abierta las 24 horas del día! El dramaturgo Chejov escribió: “Si en el primer acto has puesto un revólver en la pared, en el segundo o tercer acto debe ser disparado. Si no, no lo cuelgues”. Y Trump lo ha colgado, para ser usado.

stats