Bloguero de arrabal

Pablo Alcázar

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'La embestidura'

Mientras que los diputados se embisten, dos jóvenes catalanes, Rosalía y Rufián, homenajean a Unamuno y San Juan de la Cruz

Mientras una banda de españolazos, de 'santiagos_matamoros_y_cierra_España', de 'quítate_tú_que_me_ponga_yo' y de peregrinitos del poder, maltratan el castellano, embistiéndose con insultos en el Congreso de los Diputados, dos chicos catalanes, Rufián y Rosalía -uno, citando a Unamuno en el Parlamento y, la otra, musicalizando un poema de San Juan de la Cruz- honran el castellano. Rufián, echando mano de estas palabras que, según se dice, Unamuno habría espetado a Millán Astray en el paraninfo de la Universidad de Salamanca en plena Guerra Civil: "Venceréis, pero no convenceréis. Porque convencer significa persuadir y para persuadir necesitáis algo que os falta en esta lucha: razón y derecho… Si un señor tan conservador como él, conservador pero justo, escuchara a algunos de ustedes, lo repetiría mirándoles a los ojos. Modérense, señores de PP, Cs y Vox, que no estamos en el 36". Por su parte, Rosalía cantando, en la estela de Amancio Prada y Morente, el poema Qué bien sé yo la fonte del fraile descalzo, al que Teresa de Jesús llamaba, condescendientemente, "el frailecico", porque la santa prefería frailes más poderosos, aunque fueran peores poetas. Hubo un tiempo en el que los maestros, por ver si los estudiantes se interesaban por la poesía clásica, trabajaban con textos "venidos del mundo de los alumnos": La Polla Records, Las Vulpes, Gabinete Caligari.... Y eran tan esforzados -o tan ilusos- que encontraban coincidencias en las cosas que decían los poetas canónicos y las que cantaban los grupos citados. ¡Qué bien que Rufián y Rosalía no se hayan dejado llevar por la moda de embestir con un exabrupto o con un reguetón! Si Rufián sigue frecuentando a Unamuno, se topará con dos sonetos del bilbaíno que explican y aluden al come come que corroe y desazona el corazón de un independentista. Me refiero a los titulados La Unión con Dios -de resonancias miguelangelescas- y A mi buitre. La pasión que muestra Rosalía por Juan de Yepes en su canción Aunque es de noche la llevará al librito del místico Cautelas, y quizá entienda entonces por qué ella suscita tanta envidia en alguno de sus colegas. En todo caso, hay lugar para la esperanza: mientras que los diputados no quitan ojo del móvil, como niños chicos, nada más que para aplaudir a sus patronos, Rosalía y Rufián se solazan con las pulidas palabras de dos escritores castellanos de valía.

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