Cuando veo el Centro de Interpretación del Reino de León, su ubicación en el espléndido Palacio de los Condes de Luna, sus museos, su difusión, incluso su página web, siento una enorme tristeza porque nuestro Reino no tenga también un más que merecido Centro de Interpretación del Reino de Granada, máxime cuando más reinos presentes en el escudo de España también lo tienen, véase Aragón.

El legado del Reino de Granada se extiende desde hace más de 1.000 años hasta la actualidad, y es digno de ser preservado y puesto en valor para el conocimiento y disfrute de todos los granadinos y de quienes nos visitan. ¿Para cuándo pues el Centro de Interpretación del Reino de Granada?

En Sevilla tienen el Centro de Interpretación de la Judería, el Centro de Interpretación del Puerto de Sevilla y el Centro de Interpretación de la Primera Vuelta al Mundo, y seguro que trabajan ya otro para el Reino de Sevilla, al considerar su condición de provincia de la Corona de Castilla unida a su anterior pasado histórico.

De Abú Al-Cásim a Felipe VI –rey de Sevilla, pero también de Granada–, de la dinastía Abadí a los Borbones, de la Taifa de Sevilla, a la monarquía parlamentaria, del año 1023 a 2023, en Sevilla un destacado grupo de historiadores y profesores universitarios concibió esta iniciativa, que, con el soporte y patrocinio institucional, se materializa este año en la celebración del milenario cumpleaños del Reino de Sevilla, concebido como un “milenario de culturas” que a lo largo de los siglos han conformado la “identidad sevillana”. Y es que en Sevilla nadie pierde el tiempo, mientras que en Granada nunca llegó a celebrarse la efeméride del milenio del Reino de Granada en 2013, después de que Chaves la anunciase a bombo y platillo, porque Zarrías la abortó para impedir que se hablase de las dos Andalucías…

Como siempre, Granada a la cola de todas las iniciativas y celebraciones que fomenten la difusión de nuestro Reino.

El legado del Reino de Granada es de tal magnitud e importancia que, si nuestros políticos no abogan por su proyección e impulso, sino que permiten que se frustren nuestras iniciativas, por su abandono y decadencia, tendremos que ser nuevamente los ciudadanos los que aboguemos por las iniciativas que promuevan a Granada y su Reino, entre ellas, por la implantación de su propio Centro de Interpretación.

Los granadinos tenemos derecho a que se conozca todo el devenir de nuestra historia, única en España, nuestro Reino y nuestra identidad. Es nuestro legado.