No, si al final el caso Luis Rubiales va a suponer una crisis reputacional para Granada y todo. O el caso Koldo, en las últimas semanas algo más apagado. Una intimidad de este periódico, y seguramente de todos, es, cuando hay una noticia fuerte a nivel nacional o incluso internacional, mirar “si esto nos salpica”, en referencia a si hay granadinos en el asunto. Estos dos casos judiciales son el ejemplo más claro, aunque tiempo atrás ha habido otros muchos más. En el de la RFEF, prácticamente todos los nombres surgidos en el sumario son granadinos. No es de extrañar. Rubiales, motrileño, llenó la Federación de su gente de confianza, granadinos. Hasta de quienes llevan parcelas deportivas que nada tiene que ver con la investigación en curso por la UCO y la jueza de Majadahonda. Luego lo de la empresa que aparece en la investigación y que contrató a la mujer de Koldo García, y que está radicada también en la provincia. Y todas estas cosas, ¿no manchan el nombre de Granada de alguna manera?