No podemos más

Ya no podemos más: Koldo, Ábalos, Cerdán; Leire, Vicente Fernández, Antxón –¿no les sorprende que estos tres ahora estén libres? ¿por qué el fiscal no ha pedido prisión para ellos?–; Salazar, Izquierdo, los alcaldes de Almussafes, Belalcázar y Monforte de Lemos; Begoña, David Sánchez, Álvaro G. Ortiz; amaños de primarias ¿y qué paso con el voto por correo el 23-J con la fontanera en Correos?, ¿y los amaños de la susodicha en el caso Aznalcóllar porfiando en pro de Vicente Fernández?, y un largo etcétera de personajes…, todo va tan rápido que casi ni nos acordamos de Aldama, las Pano, Jesica, Tito Berni o la Paqui. Y aquí no pasa nada, nadie dimite ni asume responsabilidades, porque seguir pisando moqueta es prioridad, que se lo pregunten a Yoli.

La cátedra de Begoña, el despacho del hermanísimo, mascarillas, hidrocarburos, financiación irregular, la SEPI, Delcy, Plus Ultra, Air Europa, Zapatero…, hasta han registrado las sedes de varios ministerios y Correos…, millones en mordidas -con razón Vicente Fernández pasó de un pisito a un patrimonio de 10 millones-, extorsiones, contrataciones irregulares, blanqueo de capitales, prevaricación, malversación, tráfico de influencias, las saunas de Begoña en locales de Muface, el espeluznante Me Too del PSOE, prostitución…, el putero, el guapo, lo que nos quedará por ver…

Y, ante estos escándalos mayúsculos, Sánchez ni se plantea abandonar la Moncloa.

Es absolutamente intolerable que los españoles estemos aguantando esta insostenible situación, viviendo asfixiados a impuestos y sin llegar a fin de mes, mientras estos presuntos delincuentes vivían como reyes. Y Sánchez sin presupuestos, sin apoyos suficientes en el Congreso, sin gobernar, con una situación inadmisible en su partido, y con pretensiones de seguir hasta 2027, es su hoja de ruta… Eso sí, encantado de ser portada de la revista socialista L’Espresso, nombre que le viene al pelo porque, aunque ahora no es preso, quizás no le falte demasiado…

Se habla de fin de ciclo y parece que quien anima a las mujeres acosadas a denunciar es fuego amigo procedente de Moncloa, que, olida la caída del líder, pretende darle el último empujoncito, porque el desmoronamiento del sanchismo parece inminente.

Mientras, los españoles, alucinados, ya no podemos más, el deterioro institucional es mayúsculo y la degradación política límite. Esto no aguanta más.