La inocencia de un niño es, casi con total seguridad, el motivo por el que siempre pecan de sinceridad y eso es algo que el alcalde de Granada, Luis Salvador, ha comprobado en primera persona. Ayer, en una visita a la Escuela de Verano de la zona Norte, el regidor se sometió al interrogatorio 'más duro' pero sincero: el de los niños. Y es que, si en una entrevista o rueda de prensa, el primer edil puede esperarse -en cierto modo- preguntas comprometidas, ¿quién se iba a imaginar que un niño pudiera hacer la pregunta que aún muchos se hacen? Sí, el menor soltó un ¿cómo has llegado a ser alcalde?, algo a lo que Salvador contestó con una sonrisa, precisamente la sonrisa de ser alcalde. Eso sí, la cosa no quedó ahí, sino que hubo otro que tampoco se cortó y le preguntó directamente qué había pasado con el PSOE y dónde estaba el otro, en referencia a Paco Cuenca. Y es que claro, aunque sean preguntas inocentes, perfectamente se extrapolan a aquellos que sí saben -al menos lo que se ha podido contar, claro- cómo se ha fraguado todo y que aún se cuestionan qué pasará en dos años. Y si le hubieran preguntado si habrá 2+2, ¿qué habría dicho? Nos quedaremos, otra vez, con la duda.

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