La Junta destinará tres millones de euros a evitar que continúen los desprendimientos que durante más de una década afectan a la carretera A-348 que une Cádiar y Yátor, en la Alpujarra granadina, y solventará así 16 puntos conflictivos en un tramo de esta vía.

La consejera de Fomento, Infraestructuras y Ordenación del Territorio, Marifrán Carazo, ha visitado este viernes las obras de emergencia iniciadas a finales de agosto para frenar los desprendimientos en la carretera A-348 entre Cádiar y la pedanía de Yátor, en la Alpujarra.

Estos problemas de seguridad vial comenzaron hace una década y se han agravado en el último periodo de lluvias, lo que ha provocado movimientos de laderas y terraplenes que han originado hasta 16 puntos peligrosos por riesgo de deslizamientos en un tramo de apenas cuatro kilómetros.

Carazo ha resaltado que estos desprendimientos afectaban tanto al tráfico interior de la comarca como a las conexiones con las zonas contiguas de Almería y Guadix y que, según el informe de los técnicos, este tramo presentaba el peor estado de los 134 kilómetros de la carretera.

La consejera ha recalcado que se trata de un problema antiguos en el que se actuó en 2006, aunque nuevas lluvias produjeron importantes deslizamientos de taludes que provocaron un aterramiento de la calzada que aún hoy genera restricciones al tráfico. Desde 2009 se han repetido los deslizamientos hasta generar una situación que Carazo ha calificado de insostenible.

"De no haber actuado, habría obligado al corte total de la carretera, que habría derivado en repercusiones notables a la economía y el turismo de la zona, así como al acceso de servicios básicos como la sanidad o la educación", ha añadido la consejera, que ha añadido que ese corte obligaría a articular desvíos de 25 kilómetros y una hora de recorrido. La Junta declaró a finales de julio las obras de emergencia, que se adjudicaron a la empresa Grulop 21 por 2.845.216 euros y un plazo de ejecución de ocho meses.

Los trabajos se centran en el tramo de la A-348 comprendido entre los kilómetros 54 y 58, donde se han localizado 16 zonas de actuación para garantizar la seguridad vial y estabilizar las laderas que actualmente están generando problemas a la carretera. Como solución se han planteado varios sistemas de estabilización, en función de cada caso, como tratamientos mediante cimentación profunda, mallas de triple torsión o redes de cable bunoladas.