La escena más desagradable de todos los veranos es la de hectáreas de parajes naturales desapareciendo a causa de las llamas. Los incendios forestales son la principal amenaza de la supervivencia de los espacios naturales y suponen graves pérdidas que afecta al ámbito ecológico, social y económico, además de poner en peligro vidas humanas y así se ha visto, otra vez, este verano. Desde que el calor se instaló en Granada las llamas han estado presentes casi todas las semanas. Tal es así que desde el 1 de julio se han registrado casi una decena de fuegos forestales en distintos puntos del la provincia, produciéndose cinco de ellos en tan solo cuatro días en lo que llevamos de agosto –el último susto se dio la tarde de este viernes en La Zubia–, mes en el que, precisamente, se ha conocido que la Junta de Andalucía va a reforzar la defensa y prevención de los fuegos forestales en la provincia.

La Junta de Andalucía ha sacado  licitación la construcción de un nuevo centro de defensa forestal (Cedefo) en la localidad de Hernán del Valle, en Guadix, mientras que Huéscar contará con un nuevo Subcentro de Defensa Forestal. De este modo, se cubrirá una zona que hasta ahora contaba con un vacío en este sentido, pues la provincia solo cuenta con tres Cedefo: La Resinera, Sierra Nevada y Puerto Lobo. Ante ello, cuando se produce un aviso por fuego forestal al norte provincial, el Cedefo más cercano es el de Puerto Lobo, en Víznar.

El nuevo Cedefo en tierras accitanas se encuentra precisamente en la zona del Geoparque, que recibió hace un año la declaración como tal por parte de la Unesco, y cuenta con un presupuesto de 5.479.947 euros, siendo el 80% de los fondos financiados por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder) de la Unión Europea, mientras que el 20% restante lo aportará la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible a través de la Dirección General de Medio Natural, Biodiversidad y Espacios Protegidos.

Por su parte, el valor estimado del contrato para la construcción del nuevo Subcentro de Defensa Forestal de Huéscar se estima en 566.000 euros. Se trata de una inversión que forma parte del plan de mejora y fortalecimiento de las infraestructuras existentes en la provincia de Granada. Que Huéscar haya sido el municipio seleccionado para su ubicación se debe a su situación estratégica en la conformación de la red de infraestructuras del Plan Infoca, según se expone en el contrato de licitación de la Junta, consultado por Granada Hoy.

El nuevo Subcentro de Defensa Forestal con el que contará Huéscar cubre un área de influencia que en la actualidad carece de la red de infraestructuras básica del Plan Infoca, completándose con centros cercanos y adscritos al Plan como son los Cedefo de Puerto Lobo, La Resinera y Sierra Nevada. Ante ello, el nuevo Subcentro se situará en la avenida Barón Bellpuig número 3 y tendrá una extensión de 2.343 metros cuadrados.

Estas nuevas estructuras se construirán para poder para poder llevar a cabo las labores definidas en el Plan Infoca de forma más eficiente y operativa. En los últimos años se está produciendo un importante avance en la modernización de los medios y técnicas empleadas que se centra prioritariamente los medios humanos, maquinaria, vehículos terrestres y medios aéreos, y cuya siguiente fase es la de la modernización de la infraestructura que acoge a estos medios.

Las nuevas instalaciones con las que contará Granada permitirán la inserción de medios de extinción terrestre y equipos de profesionales dentro de los espacios naturales más sensibles ante los incendios forestales y se trata de puntos desde los cuales parten recursos de extinción del dispositivo del Plan Infoca, como pueden ser camiones autobombas, grupo especialistas o técnicos de operaciones. La infraestructura se completa con los centros de apoyo para las brigadas especializadas, pistas de aterrizajes y otras complementarias.

El Plan de Emergencias por Incendios Forestales de Andalucía, (Infoca), tiene como objetivo “establecer las medidas para la detección y extinción de los incendios forestales y la resolución de las situaciones de emergencia que de ellos se deriven”, así como que “la protección de la vida y la seguridad de las personas será el principio básico prevalente del Plan respecto a cualesquiera otros bienes o valores”.

Granada y Andalucía sufren especiales consecuencias por culpa del cambio climático, entre las más graves, el aumento constante de las temperaturas y la disminución de las lluvias. La Junta estima que la mayor parte de la comunidad autónoma andaluza se verá afectada por una variación significativa de las precipitaciones medias anuales en los próximos 30 años y prevé un incremento de las temperaturas máximas en Andalucía de hasta 5,4 grados al término del siglo y una disminución de las precipitaciones del 7%.

Además, hay otro tipo de consecuencias directas sobre el territorio y el litoral andaluz que implican el aumento de los fenómenos meteorológicos extremos. Estos, son cruciales para comprender el aumento de los incendios en las últimas décadas: el incremento de los periodos de sequía y, por tanto, la reducción de la disponibilidad de recursos hídricos; el incremento de índice de aridez con consecuencias como la desaparición de zonas húmedas; el incremento de la erosividad de las precipitaciones; el incremento de los procesos de desertificación.

Precisamente, a todo ello se une la situación geográfica y características del entorno que presenta gran parte de la provincia, lo cual hace que el 84% de localidades de la misma se encuentre en lo que podría llamarse lista roja de la Junta por riesgo forestal. Y es que la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible tiene un listado con aquellos municipios andaluces en los que se debe prestar mayor atención ante este tipo de situaciones, en el que se encuentran 146 localidades granadinas del total de 174 municipios que componen la provincia.