Investigan a un matrimonio de Granada por participar en una ciberestafa realizada en Alicante

Los agentes del equipo @ de la Guardia Civil de Granada han investigado a una mujer de 45 años y a un varón de 48, ambos vecinos de Cijuela, por su participación en una estafa por valor de mil euros que se perpetró a través de internet.

Esta operación tiene su origen en la denuncia de un vecino de la localidad de Aspe (Alicante) de octubre del pasado año. La denunciante manifestó que había accedido a través de un enlace de una conocida red social a una página web en la que podía invertir en criptomonedas. Tras realizar pagos por valor mil euros, no volvió a saber nada más de su dinero ni de las personas con las que había contactado para hacer la inversión.

Los investigadores de Alicante averiguaron que el dinero estafado había acabado en dos cuentas bancarias granadinas, por lo que se pusieron en contacto con sus homólogos en la Comandancia de Granada para que estos continuaran con la investigación.

La Guardia Civil sospecha que ambas personas son lo que se conoce en el argot como “mulas”, individuos que, a cambio de una pequeña cantidad de dinero, dan de alta una cuenta bancaria a su nombre, verificada con video llamada y la fotografía de su DNI, y las ceden a los verdaderos estafadores. Por dicho motivo, el hombre y la mujer han sido investigados como colaboradoras necesarias en un presunto delito de estafa y en un presunto delito de blanqueo de capitales.

La mujer investigada ya lo había sido anteriormente, concretamente el pasado mes de abril, cuando el equipo @ de la Guardia Civil de Motril la puso a disposición judicial junto con su hija, por haber participado en ocho estafas similares a esta por valor de 195.000 euros.

En aquella ocasión, la operación se originó en la denuncia de un vecino de Dúrcal, que manifestó que accedió a una página web en la que podía invertir en criptomonedas a través de un enlace de una conocida red social. Al principio hacía pequeños ingresos que inmediatamente después le generaron beneficios en su cuenta. Así, asesorado por dos personas que se pusieron en contacto con él por teléfono desde un primer momento, fue invirtiendo cada vez más dinero.

Estas dos personas, en un momento dado, le indican que su inversión había generado beneficios por valor de 24.036 euros; pero, para recuperar dicho dinero, tenía que pagar 4.552,73 euros en concepto de gastos bancarios. El denunciante hizo dicho pago y no volvió a saber nada de su dinero ni de las dos mujeres que habían contactado con él. Entre el dinero invertido y el pago realizado, al denunciante le han estafado más de 7.000 euros.