La acequia de la Alpanchía volverá a la vida con la ayuda de la Universidad de Granada
El municipio granadino de Galera acogerá el próximo 31 de mayo una jornada de voluntariado para recuperar el legado agrícola andalusí
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El paisaje agrario que caracterizaba el municipio de Galera, en el Altiplano de Granada, volverá a la vida gracias a la recuperación del último tramo de la acequia de la Alpanchía, que tendrá lugar el próximo 31 de mayo. Con estas intervenciones se pretende recuperar un valioso testimonio del legado agrícola andalusí, acequia milenaria con un gran valor ambiental, agronómico y cultural que daba vida a uno de los agrosistemas tradicionales más especiales del sureste peninsular.
Con este último empujón terminarán las labores de limpieza de la acequia iniciadas en diciembre de 2023, iniciativa impulsada por el laboratorio de memoria del paisaje MemoLab-Universidad de Granada, y con el apoyo del Ayuntamiento de Galera, la Asociación Alpanchía y la Fundación de la Caja Rural de Granada. Para llevar a cabo esta última acción, se buscan voluntarios que quieran participar en el proceso de recuperación del camino de agua, que han sido la clave del éxito del proyecto.
La Alpanchía fluía (y volverá a hacerlo) en una localización muy especial: los canales discurren por yacimientos arqueológicos de las Edades del Cobre y Bronce, así como poblados y necrópolis íberas, antiguas villas romanas y alquerías andalusís, proporcionando agua en los cuatro kilómetros que recorre a través de bancales aterrazados. La infraestructura hidráulica era heredera de los sistemas de regadío andalusís, y clave para la producción agrícola y la organización del territorio durante siglos. Sin embargo, el abandono progresivo de la actividad agraria en la comarca así como la falta de mantenimiento de la propia red de acequias ha provocado la pérdida de funcionalidad de gran parte de estos canales.
La iniciativa forma parte del proyecto Revierte, una propuesta de reactivación territorial a través de la bioeconomía forestal y el manejo sostenible del agua. Cuenta, además, con el respaldo de la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR), financiado por la Unión Europea mediante los fondos Next Generation.
Los canales de la Alpanchía representaban uno de los principales espacios de riego del municipio, con una superficie estimada de 88 hectáreas. Estas parcelas, caracterizadas por constituir pequeños bancales donde la mecanización era difícil, han sido históricamente cultivadas con frutales, hortalizas y alfalfa, aprovechando el agua canalizada. La recuperación de estos agroescosistemas tradicionales permite, por una parte, revitalizar la actividad agrícola, así como provocar mejoras en el paisaje, conservar la biodiversidad y apostar por la producción de alimentos de proximidad y por la protección de suelos y acuíferos. Además, una vez se acaben las obras de limpieza, se podrán desarrollar iniciativas como parques fluviales o sistemas de custodia del territorio.
La jornada permitirá a los voluntarios involucrarse en la recuperación de un bien común, así como comprender la importancia y favorecer a la colaboración de su preservación, no solo de la Alpanchía sino de otras en algún futuro. Las inscripciones están abiertas a quienes deseen participar.
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