La Caleta de Salobreña contará con una nueva playa y cerca de 8.000 metros cuadrados de arenal
El proyecto tiene un plazo de ejecución de 12 meses desde su inicio y traerá consigo el desbloqueo del desarrollo urbanístico en la zona
Salobreña recuperará de forma natural la playa de La Caleta con un espigón
El sueño de pasear por la playa de Salobreña de punta a punta sin pisar asfalto está más cerca de ser una realidad. Hasta ahora el tramo de apenas unos 200 metros que separa La Guardia de La Caleta a su paso por la fábrica de azúcar había que hacerlos sobre la escollera de piedra que protege al ingenio de Nuestra Señora del Rosario de la fuerza del mar, sin embargo, próximamente la piedra y el cemento darán paso a cerca de 8.000 metros cuadrados de playa.
El objetivo es devolver a esta zona del litoral parte del aspecto que lucía en el siglo XX, antes de que se construyese el frente de piedras para proteger a la azucarera del oleaje.
La Dirección General de la Costa y el Mar, organismo dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, ha anunciado la licitación de uno de los proyectos que más tiempo llevan esperando en la zona. Con la publicación de la licitación del contrato de servicios destinado a la redacción del Proyecto constructivo y estudio de impacto ambiental para la incorporación y el acondicionamiento como playa de los terrenos de la antigua azucarera Nuestra Señora del Rosario, en la Caleta (término municipal de Salobreña), están un paso más cerca de que sea una realidad.
Según apuntan fuentes municipales a este periódico, en 2021 se redactó el primer proyecto que contemplaba la reordenación de todo este espacio, incluido dentro del plan SUT-1 en el que se ordenaba el ámbito donde se ubica la antigua azucarera, la incorporación como suelo dotacional destinado a espacios libres el espacio afectado. Los promotores del desarrollo de los suelos y el Ayuntamiento contemplaba históricamente construir una instalación portuaria, aunque tras años de consultas se descartó por ser poco viable, y surgió la oportunidad de incorporar los terrenos a la playa, dándole continuidad en su extremo de poniente hasta el núcleo urbano de La Caleta.
Sin embargo, tras la adjudicación del proyecto y durante la recogida de datos, los técnicos detectaron numerosos ejemplares de Patella ferruginea, una lapa en peligro de extinción que se encuentra dentro del Catálogo Español de Especies Amenazadas en su máxima categoría, y todo se paralizó. La idea era buscar otro lugar de la Costa Tropical, cercano, con las mismas condiciones, para trasladar las lapas.
En 2023 los técnicos establecieron medidas no contempladas anteriomente en el proyecto, por lo que ahora buscan la redacción de un nuevo proyecto constructivo, que desarrolle lo estudiado y valorado en el proyecto ya redactado, e incorpore igualmente las nuevas medidas teniendo en cuenta factores como el clima marítimo, la dinámica litoral, los efectos de las obras y plantee alternativas viables, que permitan recuperar los terrenos de la azucarera y estudie la futura evolución de la línea de costa.
El objetivo es recuperar parte de los terrenos ocupados actualmente por aquellas de las antiguas instalaciones no catalogadas como bien de interés cultural de la antigua azucarera Nuestra Señora del Rosario de la Caleta de Salobreña. Está prevista la demolición de la actual escollera que protege dichas instalaciones, la construcción de un nuevo muro de retranqueado hasta 30 metros sobre el frente litoral actual y la ejecución de un paseo interior a dicha escollera que facilite el tránsito y la conectividad entre el núcleo de La Caleta de Salobreña y la playa de la Guardia.
La actuación contempla la regeneración y recarga de arena para lograr recuperar cerca de 8.000 metros cuadrados de playa actualmente inexistentes en el extremo a poniente del propio núcleo de la Caleta, junto con la ejecución de un pequeño dique exento, que garantizará la continuidad de todo el frente litoral desde la propia Caleta hasta la desembocadura del Guadalfeo.
En paralelo a la redacción del proyecto constructivo se realizará el estudio de impacto ambiental que tendrá en cuenta todas las posibles afecciones de esta actuación, así como las medidas mitigadoras y compensatorias a llevar a cabo en su caso.
El plazo para presentar las ofertas por parte de los licitadores acaba el 23 de diciembre y una vez licitado el contrato, la empresa que desarrolle las obras tendrá un plazo de ejecución de 12 meses y un presupuesto base de licitación, IVA incluido, de 139.299,7 euros.
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