La falta de contenedores en el núcleo urbano impide el reciclaje

Concienciar a los ciudadanos para que reciclen los residuos y utilicen el sistema de recogida selectiva es difícil. Las constantes campañas que ponen en marcha las administraciones son escasamente atendidas por la población que, en su mayoría echa todos los residuos en un mismo bote, principalmente por comodidad. Pero los pocos que se comprometen con el Medio Ambiente y deciden tomarse en serio el trabajo de reciclar, se encuentran en Almuñécar con un importante obstáculo: la ausencia de contenedores de vidrio, plástico, papel y cartón en el casco urbano, situación que también se repite en el núcleo de La Herradura.

Desde hace ya varios años, por decisión del anterior gobierno municipal, se acordó trasladar todos los contenedores de recogida selectiva a la N-340. No sin razón, la anterior administración se quejaba de la escasa frecuencia con que se producía la recogida de estos contenedores, aunque probablemente haya errado en la solución elegida.

La medida supone que todos aquellos vecinos del municipio que se toman la molestia de distribuir en sus hogares los residuos de cara a un posterior reciclaje, tengan que añadir una nueva: la de montarse en su coche y desplazarse con estos desechos hacia alguno de los puntos de la carretera en los que se encuentran los contenedores. Una acción que, por la contaminación que genera, a todas luces va en contra del espíritu del reciclaje, que es la conservación del entorno.

Una dificultad que se les añade a aquellos ciudadanos concienciados con el Medio Ambiente es la escasa frecuencia con que se vacían los contenedores, responsabilidad que compete a la empresa Resur en el caso de los envases y el cartón y a Ecovidrio, en el de las botellas. Pueden pasar semanas y hasta meses sin que se lleve a cabo la recogida en algunos de ellos, por lo que los vecinos se pueden encontrar con que, al llegar a los núcleos de contenedores, están saturados con residuos que incluso se salen de la boca por la que se deben introducir, y en algunos casos hasta depositados en los alrededores. Por tanto, no les queda otra que volver a cargarlos en sus coches y buscar otros recipientes con la esperanza de tener más suerte.

Estas deficiencias en la recogida son hechos que ha denunciado tanto el anterior equipo de gobierno como el actual. El concejal de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Almuñécar, Luis Aragón, aseguró que actualmente "se está elaborando un proyecto para saber dónde están ubicados los contenedores y dónde podríamos ubicar otros con el menor impacto posible". Pero aclara que, "antes de eso, tenemos que llegar a un acuerdo con las empresas para que los recojan con más asiduidad, porque si no se convierten en puntos de concentración de suciedad. Algunos no los recogen con toda la frecuencia que deberían".

Aragón no ve mal que haya contenedores a la vera de la N-340 como en la actualidad, pero señala que "tenemos que intentar que estén más cerca de los ciudadanos". Para ello el Área de Medio Ambiente deberá estudiar detenidamente las posibles ubicaciones, buscando que molesten lo menos posible a los vecinos y no generen un impacto ambiental negativo. El proyecto está aún en ciernes, ya que el nuevo edil todavía no lleva ni un mes en el cargo.