Tráfico intenso pero fluido a las puertas del primer fin de semana tras el corte de la autovía de la Costa de Granada

La antigua Nacional 323 ha sobrellevado de buena manera el aumento en la densidad del tráfico que transita por ella los primeros días tras el corte en ambos sentidos del tramo de la A-44 a su paso por la presa de Rules. La primera prueba de fuego llegará este mismo fin de semana, cuando está previsto que aumente el número de usuarios que aprovechan el fin de semana para desconectar y bajar a la costa, aunque se espera que no surjan grandes incidencias tras lo visto en los últimos días en las consideradas horas puntas. Sin ir más lejos, este mismo viernes los usuarios que han transitado por la vía han visto como tenían que reducir su velocidad por la densidad de coches, aunque sin grandes sobresaltos.

Según apuntan algunos conductores que tienen que realizar este trayecto al menos dos veces al día por motivos de trabajo, la mayor molestia se encuentra en el cruce del puente de Vélez de Benaudalla. Si el trayecto se hace dirección Granada un STOP les obliga a parar su marcha a la espera de que los coches que vienen de frente completen el giro, para posteriormente continuar la marcha e incorporarse con los que entran desde la autovía. En el caso contrario, y si se decide salir de la carretera nacional y no continuar por el Tajo de los Vados, llega una zona de curvas hasta dar con la autovía.

Según apuntan desde el centro coordinador de Emergencias del 112 Andalucía, este viernes no se ha registrado ningún incidente reseñable en esta zona de la carretera que haya provocado la ralentización del tráfico o la intervención de otros servicios. Algo que sí ha ocurrido en la A-92 a la altura de Loja, tras la colisión entre varios vehículos que ha dejado a tres personas heridas y grandes retenciones en la zona dirección Granada.

Mientras tanto, las obras del viaducto de Rules continúan adelante y obliga a los conductores a utilizar la antigua carretera de la Costa, en ambos sentidos hasta, al menos, el próximo 19 de diciembre. Esto hará que los vehículos vuelvan a circular por el viejo puente de hierro de Los Acebuches e Ízbor, y que se pueda volver a disfrutar de la panorámica de la presa desde el otro lado del embalse.

De esta manera, los conductores que bajen a la Costa tendrán que dejar de circular por la A-44 cuando lleguen al kilómetro 167, tomando el desvío hacia la vieja carretera nacional N-323 a la altura de Ízbor, de la misma forma que ocurría cuando los viaductos de la autovía de Rules no estaban construidos y había que seguir el camino hacia la playa por la carretera antigua.