El segundo domingo de Cuaresma ha dejado en Granada un sugerente número de actos y convocatorias que dan fiel reflejo de la vida y actividad de las hermandades y cofradías. Un fin de semana que, juntamente con los primeros quinarios y cultos cuaresmales, ha llevado a las calles de la ciudad a miles de personas para disfrutar de los vía crucis, traslados, procesiones, presentaciones de cartel o conciertos que se han dado lugar. 

El punto de inicio de este fin de semana lo dio el tradicional besapiés a la imagen de Nuestro Padre Jesús del Rescate que, como cada viernes de la primera semana de Cuaresma, bajó de su hornacina para recibir la veneración de los granadinos. Un acto de culto piadoso que, una vez más, contó con un seguimiento masivo a lo largo de toda la jornada. Para la ocasión, la imagen del Señor de la Magdalena se presentó sobre la peana labrada por Navas Pareja y con una de las túnicas bordadas con las que cuenta. Preludio para una jornada que tuvo en el vía crucis oficial uno de los momentos más importantes del día, con la participación de cientos de cofrades tanto en el traslado de Nuestro Padre Jesús Cautivo como en el rezo de las estaciones en el interior de la Catedral, junto al arzobispo de Granada.

El sábado vino marcado por la celebración de la procesión de San Juan de Dios, copatrón de la ciudad. Una manifestación de fe por las calles que volvió a dar testimonio de la devoción que el santo portugués sigue despertando entre los fieles granadinos. La ocasión trajo consigo la presentación, de nuevo, del Niño Jesús de la Granada antecediendo al paso del patrón de la Orden Hospitalaria. Mientras esto tenía lugar en las inmediaciones de la basílica y del centro de Granada, en el barrio del Sacromonte la Hermandad de los Gitanos llevó a las calles al Cristo del Consuelo para rezar en torno a él las catorce estaciones del vía crucis.

Jornada esta que también vino marcada por la presentación de carteles en distintas cofradías, destacando muy especialmente la que tuvo lugar en la parroquia de Regina Mundi. La Hermandad del Señor Resucitado se encargó de dar a conocer la producción gráfica que anuncia su próxima estación de penitencia el Domingo de Pascua: un trabajo realizado por el diseñador malagueño Lazarus y que contó con la palabra del periodista y cofrade Vicente Gomariz para dar a conocer esta apuesta por la vanguardia en las artes cofrades.

El segundo Domingo de Cuaresma, en el que se leyó la transfiguración de Cristo, dejó en Granada dos actos singularmente importantes dentro del calendario cofrade granadino. La primera de ellas, la procesión infantil de la Hermandad de la Esperanza que volvió a concitar a la chiquillería en el torno de Plaza Nueva a cientos de familias para acompañar al pequeño Nazareno de Alberto Fernández Barrilao. Un evento que se consolida y que cobra fuerza año a año.

En el Albaicín, horas más tarde, tendría también cita la Granada cofrade. Esta vez para acudir al traslado de la imagen de Nuestro Padre Jesús del Tres Caídas desde el convento franciscano de Santa Isabel la Real. El titular cristológico de la Hermandad del Rosario abandonó, un año más, la clausura de las hermanas clarisas para desplazarse hasta el Realejo para esperar un nuevo Miércoles Santo.