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La cerámica granadina de Fajalauza, una tradición histórica que busca impulso

  • Se estudia la firma de un convenio municipal con la Fundación Fajalauza para trabajar en su puesta en valor

Cecilio Madero y Manuel Olivares, durante la visita a la fábrica de Fajalauza.

Cecilio Madero y Manuel Olivares, durante la visita a la fábrica de Fajalauza. / E. P.

El Ayuntamiento de Granada y la Fundación Fajalauza están estudiando la firma de un convenio de colaboración con el fin de "realzar, poner en valor e impulsar una tradición histórica nuestra de más 500 años, como es la cerámica granadina".

Así lo ha explicado a Europa Press el concejal de Turismo de Granada, Manuel Olivares, tras una visita a las instalaciones de la emblemática fábrica, en la que ha abogado por "explorar diversas opciones que van desde la creación de un espacio museístico hasta un ámbito formativo y de investigación".

"Creo que es fundamental mantener viva esta tradición que viene de nuestras raíces y hacerlo en este lugar al que le debemos tanto, un espacio que debe estar abierto al Albaicín y a toda la ciudadanía", ha explicado Olivares, en referencia a la fábrica.

Por ello, y según la información facilitada por el Ayuntamiento, es importante impulsar ese refuerzo necesario y establecer una línea permanente de colaboración entre el Consistorio y la Fundación Fajaluza.

Así, las posibilidades planteadas contemplan, además de la creación de un espacio museístico, otras acciones formativas "similares a la colaboración" firmada, por ejemplo, con la Universidad de Granada en este ámbito.

"Al final se trata de que algo tan importante como es la cerámica granadina, no se pierda y que nuestros jóvenes la sigan manteniendo y conozcan a través de la familia esa puesta a disposición de un espacio museístico", ha indicado el concejal de Turismo.

Durante su visita a la fábrica, el edil ha estado acompañado por Cecilio Madero, patrono de la Fundación Fajalauza y uno de los miembros de la familia que ha mantenido esta tradición durante casi 500 años.

Madero ha coincidido con el Ayuntamiento en que "debe ser un lugar abierto al conocimiento, el aprendizaje y la investigación", y "un espacio en el que los ciudadanos se desarrollen visitas, donde haya clases y contacto directo con los objetivos".

Para ello, tanto el Ayuntamiento como la Fundación están de acuerdo en que la forma de que esta tradición siga viva pasa por mantener la producción de la cerámica de Fajalauza, de forma que se pueda enseñar y mostrar en directo.

Además de contar con el único horno de tipología hispano-árabe que existe actualmente en Granada, la cerámica de Fajalauza, utilizada en diversas restauraciones realizadas en la Alhambra, fue medalla de Plata de la Exposición Universal de Bruselas (Bélgica) en 1910.

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