Quién lo diría, los alumnos echando de menos hasta a los profesores y sus horas por los pasillos entre clases y clases. El dichoso coronavirus ha servido para poner en valor el sistema educativo en todas sus vertientes y lo importante que es la socialización desde que nacemos. Es por ello que hoy son los menos los estudiantes que ven estos días como unas vacaciones. "A tenor de las respuestas o mensajes recibidos en las plataformas, aplicaciones digitales u otras herramientas empleadas, sí echan de menos el contacto con sus compañeros e, incluso, aunque pueda llegar a sonar sorprendente a sus profesores", asegura el docente Rafael Bailón Ruiz que junto a José Luis Abraham López y otros profesores del Instituto Diego de Siloé de Íllora han sido los impulsores del proyecto ¿Invisibles? que intenta concienciar sobre la lacra del acoso escolar.

La iniciativa echó a andar a principios de curso y sigue en marcha dando nuevos pasos a pesar del confinamiento, las distancia y de las notables dificultades que la comunidad educativa está encontrando en el sistema de trabajo online, algo que pese a que se venía trabajando es totalmente un nuevo mundo por desarrollar aún siendo conscientes de que "al final, el contacto o la cercanía que desprende la enseñanza presencial no puede ser sustituida por un trabajo a distancia".

"Está resultando una tarea complicada, en unos casos más que en otros. Si bien la mayor parte del alumnado sigue las clases con total normalidad, aunque es cierto es que hemos de ser comprensivos ante una brecha triple que se nos presenta", asegura Bailón en referencia a las diferencias que se abren en conocimientos en referencia a cuestiones como la "atención a la diversidad" o las "necesidades educativas específicas", el añadido del componente socieconómico de las familias y en tercer lugar las competencia digitales de cada alumno, puesto que cada uno pilota a niveles diferentes.

Asimismo, respecto al bullying, esa nefasta conducta social tan difícil de erradicar, contra la que lucha ¿Invisibles?, este profesor del IES Diego de Siloé cree que en estos momentos de si se produce un caso de acoso escolar es todavía una tarea más compleja de abordar "Si en condiciones normales, el alumno se siente indefenso o vulnerable, en estos momentos que vivimos encerrados (sin contacto con el exterior), un posible linchamiento u hostigamiento a través del mundo cibernético o redes sociales puede afectar aún más si cabe", opina.

Calendario solidario

En todo caso, ve al alumnado cada vez más concienciado sobre esta lacra al tener un mejor conocimiento de los diferentes roles. Así, a través de su experiencia con ¿Invisibles? considera que es fundamental "trabajar la empatía cognitiva y afectiva". Una iniciativa que es un granito de arena más en un problema social que, a juicio de los responsables del proyecto, hay que abordarlo desde todos los frentes. “Comunidad educativa, administraciones, asociaciones, y, por supuesto, organismos públicos, debemos remar o trabajar conjuntamente”, asegura este educador para el que la lectura positiva tras el confinamiento será el de una mayor unidad de las personas.

También cree que se va dar valor a otros conceptos como la humanidad y a los valores en general para afrontar grandes problemas sociales como el acoso escolar. "Si sabemos acabar con él, ello redundará en un incuantificable beneficio, a nivel individual y colectivo para las generaciones presentes y las futuras", indica Bailón Ruiz, que agradece el grado de implicación de las familias y los jóvenes en el proyecto que está realizando este instituto de Íllora.

Relatos, exposiciones, programas de radio, 'lipdubs' o juegos: todo vale contra el 'bullying'

Y en qué consiste este programa de ¿Invisibles?. La ingente cantidad de actividades habla por sí sola. Relatos elaborados por el alumnado, guías de lectura, desayunos literarios, exposiciones de trabajos plásticos, viñetas o creaciones gráficas de dibujantes, propuestas a partir de fotogramas, juegos de mesa, podcasts, calendarios, cortometrajes, lipdubs u obra de teatro centrada en este tema, son algunas de las líneas de trabajo que se contemplan en este programa.

Así, lo que en el mes de septiembre comenzó siendo unas contadas líneas de actuación, se ha convertido en un ambicioso proyecto con numerosas y variadas actuaciones. Al calendario solidario, realizado a beneficio de Aupa (Asociación de Madres y Padres de Niños Oncológicos de Granada), se han ido sumando otras actividades de muy distinta naturaleza: un pasapalabra en castellano, inglés y francés que recoge más de doscientas entradas de palabras relacionadas con el acoso; diseño de títeres y representaciones teatrales; relatos que los alumnos han realizado a partir de fotogramas de películas que tratan sobre el acoso escolar y que se han ido emitiendo secuencialmente en Radio Alfaguara; y exposición de viñetas sobre el bullying prestadas por dibujantes son algunas de las actividades concretas que se han realizado.

Algunas personalidades de prestigio (el actor Nacho Guerreros y la periodista Sara Brun entre otros) han contribuido con su testimonio gráfico a cumplir los objetivos del proyecto: informar, formar, concienciar, prevenir y resolver conflictos originados por este complejo fenómeno del acoso escolar que afecta a muchos adolescentes.

Además, han diseñado fichas de trabajo a partir de canciones, cortometrajes y películas que tienen al acoso escolar como tema central y que se ha ido trabajando desde las tutorías y desde distintos departamentos didácticos. El alumnado participante abarca toda la ESO, Bachillerato, ciclos y FP.

Según explican los docentes, son varias las editoriales que han mostrado su interés. SM, Edelvives, Casals, Now Evolution, Grupo Editorial Sargantana, Raspabook, Editorial Algar, Esdrújula y Dokusou, entre otras, han prestado ejemplares de su catálogo y vienen colaborando en la difusión.

Una exposición gracias a 'El batracio amarillo'

Exposición de ¿Invisibles?

Una de las muchas actividades que se están realizando se puso en marcha el pasado 4 de febrero, cuando en el recibidor de dicho centro quedaron expuestas cuarenta viñetas de reconocidos dibujantes.

El material ha sido recogido gracias a la ayuda de la conocida revista de humor satírico El batracio amarillo y a firmas tan prestigiosas en el mundo del cómic como La rata gris, Igepzio, Daniva go, Puebla de Murcia, El Koko, el jienese Juan Carlos Contreras, Lucho, Nani de Argentina, Pachi & Idígoras de Málaga, Pato, Malagón de Madrid, Enrique, El Juan Pérez de Córdoba, Palmas, Armengol de Cuba, Art Molero de Jaén, Miki y Duarte, Martín Favelis de Argentina, entre otros.

Distribuidos en cuatro paneles encabezados por el título del proyecto, ¿Invisibles?, los dibujos recogen instantáneas (bien narrativas o descriptivas) representativas de distintas situaciones de acoso escolar, y en las que el alumnado puede observar y reflexionar –desde el aspecto artístico como educativo– sobre distintos estados de ánimo, causas y consecuencias e implicaciones que este tema tiene allí donde se produce.

Algunas de las instantáneas, de tamaño variable, vienen complementadas con texto; otras están abiertas a la sugerencia, a la indagación o a la subjetividad. Unas desde el humor gráfico, otras desde una imagen impactante y sobrecogedora, las hay que sintetizan la repulsa y el rechazo como la importancia de la autoestima y de la imagen personal