El calor ya asoma en la provincia de Granada. Aunque estos días todavía se puede disfrutar de temperaturas primaverales, gracias a las recientes lluvias que han marcado el temporal de las pasadas semanas, es cierto que poco a pocos los termómetros empiezan a marcar máximas más altas.

Es por eso que, para cuando llegue el auténtico verano, con temperaturas que sobrepasan los 40 grados, es importante conocer algunas de las zonas de Granada donde el calor no es tan sofocante y permite tener un respiro ante las altas temperaturas.

Si uno quiere seguir estando por el centro hay algunas zonas que son las más recomendadas. El Albaicín, al estar en la zona más alta del centro, y al tener calles mayormente en sombra gracias a su poca anchura, hace que las temperaturas no sean tan acusadas. A la vez cuenta con plazas y miradores perfectos para ver la puesta de sol.

Otro de los lugares que merece la pena por tener sombra natural es la Cuesta de Gomérez. Esta calle cuenta con todo un trayecto cubierto por grandes árboles. Aunque está en cuesta hay varias plazas que se encuentran en el trayecto con bancos, fuentes y sombra igualmente. Ya sea subiendo y llegar hasta la Alhambra o bajar y llegar hasta la Puerta de las Granada, es un camino muy recomendable.

Dentro de este trayecto se puede acceder al Carmen de los Mártires. Unos jardines que cuenta con un bonito jardín y unas impresionantes vistas. Se puede pasear y está abierto a todo el público.

Fuera de la capital las opciones son muy amplias. La Costa Tropical cuenta con numerosas playas bañadas con el mar Mediterráneo. Ya sea en Motril, Almuñécar o Salobreña, es una de las opciones más recurridas para paliar el calor.

Otro de los lugares más recurridos y que cuenta con el plus de la naturaleza es la montaña. Ya sea subir a Sierra Nevada o acudir a alguno de las hermosas zonas rurales como la Alpujarra. Pueblos como Trevélez o Lanjarón cuentan con un entorno con bellas vistas y con unas temperaturas muy relajadas.

Igualmente siempre es recomendable tener cuidado con la exposición prolongada al sol e hidratarse adecuadamente.