El inicio del curso universitario llega y con él la búsqueda de pisos. Por ello, no es raro que a estas alturas las paredes, las farolas o los árboles de la ciudad se llenen de carteles. Unos soportes publicitarios que en principio son gratuitos, pero que pueden salir muy caros, ya que acarrean multas de entre 150 y 900 euros.

Así que el Ayuntamiento, para evitar la saturación de carteles en el mobiliario urbano de la ciudad, ha puesto a disposición de los granadinos 10 carteleras dispuestas por los principales centros universitarios y los lugares de mayor paso de la capital. Entre las principales zonas en las que se instalará este sistema se encuentran la Estación de Autobuses, la Facultad de Medicina, los Comedores Universitarios, la plaza Albert Einstein o la glorieta situada en Arabial.

El concejal de Medio Ambiente, Mantenimiento y Limpieza, Juan Antonio Mérida, explicó ayer que el pasado año la fijada de carteles en zonas no permitidas supuso la apertura de 150 expedientes. Sin embargo, reconoció que el principal problema es identificar a la persona en el momento en el que se están pegando los diferentes anuncios.

Para evitar tanto las multas como la saturación de carteles, la iniciativa puesta en marcha por el Ayuntamiento tiene por objetivo proporcionar a los ciudadanos un lugar en el que poder fijar sus anuncios sin peligro a enfrentarse a una sanción. Y, de paso, facilitar el trabajo al servicio de limpieza, que actualmente no dispone de medios suficientes para limpiar de carteles toda la ciudad.

Este sistema quedará fijado a finales de la semana y proporcionará una forma ordenada y localizada en la que poder buscar y ofrecer todo lo que los usuarios estimen oportuno.