La Fiscalía de Granada elevó de 2 años y 3 meses a tres años su petición de cárcel para la madre que fue juzgada ayer por agredir a la maestra de su hijo tras enterarse de que éste no había podido comerse su bocadillo durante el recreo. Las acusaciones pública y particular atribuyen a Estefanía C. F. un delito de atentado y una falta de lesiones por esta agresión que tuvo lugar el 18 de noviembre en el Colegio Federico García Lorca de Fuente Vaqueros.

Durante el juicio rápido, la acusada admitió haber golpeado a la víctima. Relató que irrumpió en clase para preguntar quién había impedido a su hijo comerse su merienda y que la agredida le manifestó que había sido ella. "Se puso muy chula y me dijo que yo no mandaba allí", dijo para justificar la agresión -la cogió del pelo y zarandeó-. La maestra declaró que la acusada no atendió a explicaciones y que la amenazó con "que la iba a rajar".

El fiscal recordó que la agresora ya fue condenada por agredir a un agente, y que es una persona "violenta" que "se tomó la justicia por su mano".