A dos días de la huelga general del 14-N, el miércoles próximo, se aceleran los preparativos y no sólo en las sedes de sindicatos y asociaciones que secundarán el paro. La empresa malagueña Adivin, dedicada a la fabricación de banderas, tiene estos días un ajetreado ritmo de trabajo para que todos los encargos estén terminados a tiempo. "Los pedidos y la producción se ha disparado con la huelga, por lo que hemos tenido que contratar a más personal". Tanto, que la plantilla se ha triplicado e incluso está echando horas extras para cumplir con los pedidos, comentó a Europa Press, el gerente de Adivin, Juan Antonio Moreno.

Esta empresa malagueña no vende sus productos a partidos, sindicatos e instituciones, sino a otras empresas que se encargan de la distribución. "Nosotros realizamos productos de marca blanca, nunca ponemos nuestro nombre o sello porque el producto que fabricamos no va a los consumidores finales", explicó el responsable de la empresa.

Tan sólo han transcurrido poco más de seis meses después de la última huelga general -29 de marzo-, aunque Moreno ve grandes diferencias entre ambos paros. "En esta ocasión se nota una mayor organización y planificación por todas las partes. Los encargos se han hecho con mucho más tiempo y todo se ha gestionado mejor", ha anunciado Moreno, quien ha observado que "la producción para esta huelga general ha sido el triple que en la de marzo".

Además, la huelga general ha hecho que la plantilla de Adivin se haya visto multiplicada, ante el volumen de trabajo a realizar. "Hemos contratado a 13 nuevos trabajadores, algo que es importante en el contexto social actual, para poder hacer frente a tal volumen de trabajo", aseveró Moreno. Aunque su origen es malagueño, su radio de ventas es de nivel nacional y muchos lugares y empresas poseen banderas fabricadas por esta empresa. Además de con la huelga general, Adivin ha tenido una importante demanda en los últimos meses. "Unas 30.000 banderas se han vendido para la campaña electoral de Bildu, en los comicios autonómicos del País Vasco, y también muchas independentistas para Cataluña", informó Moreno, quien explicó que la personalización de las banderas es "el sello propio de Adivin".

A otras pancartas se refirió ayer el secretario general del PP-A, José Luis Sanz, para advertir al "bipartito de perdedores" que "no hay pancarta en España lo suficientemente grande para que el PSOE esconda su responsabilidad en la crisis económica y en los más de cinco millones de parados que tiene este país". Sanz se enganchó a la polémica surgida en el seno del propio Ejecutivo autonómico sobre el apoyo explícito de los consejeros de Izquierda Unida a la convocatoria del 14-N para criticar al Gobierno de José Antonio Griñán porque "ahora resulta que los que han metido a este país en el agujero económico en el que se encuentra van a salir a la calle a liderar las propuestas, a esconderse detrás de las pancartas", dijo el dirigente popular.