Sucesos

El presunto secuestrador de la concejal de Maracena Vanessa Romero habla por primera vez ante la Guardia Civil

Imagen de archivo de la sede de la Comandancia de la Guardia Civil en Granada

Imagen de archivo de la sede de la Comandancia de la Guardia Civil en Granada / JESÚS JIMÉNEZ / PHOTOGRAPHERSSPORTS

El presunto secuestrador de la concejal del Ayuntamiento de Maracena, Vanessa Romero, ha realizado este miércoles su primera declaración ante la Guardia Civil tras pasar casi un mes de este suceso y de su detención, tras presuntamente retener y amordazar en su coche durante unas horas a la compañera del equipo de Gobierno de su pareja hasta ese momento, la alcaldesa de esta localidad, Berta Linares.

Según fuentes del Instituto Armado, el hombre ha declarado en dependencias policiales este miércoles a petición propia. Esta declaración tendrá que ser validada por el propio sospechoso en las próximas semanas ante el Juzgado de Instrucción número 5 de Granada, que estudia el caso, y que declaró el secreto de sumario del mismo, razón por la que no se conocen más detalles. El hombre se encuentra en prisión provisional, comunicada y sin fianza como supuesto autor de los hechos. 

Precisamente hace una semana la propia Vanessa Romero declaraba también por primera vez tras los hechos en el Juzgado de Instrucción número 5 de Granada, que instruye el caso del secuestro. Por el momento, esta ha sido la única vez que Romero, acompañada por su marido en los juzgados de Caleta, ha declarado ante el juez, después de que denunciara ante la Guardia Civil los hechos, que tuvieron lugar el pasado 21 de febrero.

Los hechos ocurrieron después de que la concejal dejara a sus hijos en el colegio y se encontrara con el supuesto secuestrador, al que conocía porque hasta ese momento era la pareja de la alcaldesa de Maracena. El acusado supuestamente le puso como excusa para subir a su coche que se había quedado sin gasolina y ya dentro del vehículo la amenazó con un pistola que la Guardia Civil ha confirmado que era simulada.

En un momento dado, habría atado a la edil con bridas de pies y manos, tapado la cabeza y obligado a meterse en el maletero de su vehículo, el cual estacionó en un local de Armilla antes de marcharse. Ella logró escapar y pedir ayuda, tras lo que denunció los hechos.

Coincidiendo con el Pleno extraordinario que la alcaldesa convocó para dar respuesta a la petición de explicaciones de los grupos de la oposición en el Ayuntamiento de Maracena, el pasado miércoles, 1 de marzo, su marido dijo a los medios que su mujer y Linares "no se llevaban bien" y aunque rehusó profundizar en la hipótesis de que este secuestro pueda estar vinculado con una presunta trama de corrupción en el Consistorio que ella pretendía destapar, si reconoció que su esposa tenía "papeles" y temía "represalias".

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