La Cofradía la Oración de Nuestro Señor en el Huerto de los Olivos y María Santísima de la Victoria pudo cumplir con su estación de penitencia no defraudó ayer a los miles de fieles que salieron a la calle para admirar a sus titulares. Un año más, centenares de personas se congregaron a ambos lados de la calle en las inmediaciones del número 46 del Camino de Las Cañas para vivir a las 20:00 horas la emocionante salida de la casa de hermandad.

Este año cambió su recorrido, en una vuelta al original. En vez de realizar su recorrido hacia abajo, se dirigió a la rambla del Manjón y al Señor de Junes -una de las estampas más bonitas de la procesión-, para continuar hacia la avenida de San Agustín, donde el público les arropó de manera especial, conscientes de que allí está su sede.

Entre las novedades de este año se encontraba el Ángel Confortador, obra del imaginero pontanés Jesús Gálvez Palos, que aunque ya procesionó la pasada Semana Santa volvió al taller para enriquecer su policromía y completar la talla del cuerpo presentando una nueva disposición. Está realizado en madera de cedro, policromado al óleo a base de veladuras y ceras, con un tamaño de 1,70 centímetros. Destacan de él sus llamativas alas. Gálvez también talló la imagen del Señor de la Humildad que se estrenó el pasado 2016. Con esta talla del Ángel Egudiel se completa la primera fase del misterio de esta cofradía.

También destaca el nuevo árbol artificial, de gran realismo. Se trata de un olivo que se ha realizado para dar una mayor comodidad a la salida desde su casa de hermandad. A este momento de emoción le siguió también la lluvia de pétalos en la calle Zapateros, por parte de sus hijos, sus pies en este Lunes Santo.

En cuanto a los acompañamientos musicales, repitió la banda del palio, Nuestra Señora del Amor y del Trabajo Ribera del Genil de Granada, y también se pudo disfrutar de los sones de la Agrupación Musical Arroquia Martínez, de Jódar, Jaén, que fue la encargada de acompañar el paso del Señor de la Humildad y ensalzó aún más a su titular en la calle.

La imagen de María Santísima de la Victoria Virgen, que ya cuenta con 24 años, reinó también en las calles motrileñas hasta la una de la madrugada, momento en el que regresó a su Casa de Hermandad.