Casi una semana después de la inauguración de la rotonda de acceso a la Ronda Sur de Motril, las dudas sobre si las actuaciones realizadas fueron las más adecuadas, se siguieron todos los procedimientos administrativos necesarios y si el motivo de su ornamentación, supuestamente a cargo de la empresa Ron Montero, así como el acto religioso que se realizó, están en el punto de mira estos días. 

El pasado viernes un grupo de representantes políticos, sociales, así como de la empresa e invitados, se concentraron en las inmediaciones de la citada rotonda para celebrar su inauguración. La alcaldesa de Motril, Luisa García Chamorro, explicó que "cuando se plantea el proyecto de la segunda fase de la Ronda Sur y la rotonda se queda fuera del ámbito, estuvimos pensando cómo podíamos decorarla para que luciera como inicio de esta gran arteria de comunicación, y plantemos la posibilidad de que la familia Montero nos cediera unos toneles para adornarla como un lugar singular de nuestra ciudad", y que que la familia Montero se ofreció para encargarse además de la instalación de este pequeño elemento alegórico no solo a Ron Montero y al ron, sino que también a la caña de azúcar.

Algo que para el Grupo Municipal de IU-Equo, se ha configurado como un espacio publicitario preferente para la marca, y que según fuentes municipales, la empresa ha aportado una "cantidad superior a los 50.000 euros", a pesar de que no consta la existencia de ningún convenio ni documento administrativo relacionado con esta donación entre las partes. Y señalan que García Chamorro incidió en que el Ayuntamiento "únicamente ha intervenido en labores de coordinación y en los trabajos habituales de mantenimiento y jardinería de dicha rotonda".

La coalición de izquierdas asegura que han intentado recabar información en las diferentes Áreas municipales sobre el procedimiento administrativo seguido para la ejecución de esta actuación, sinobtener resultados positivos. Por lo que han solicitado por escrito el acceso al expediente completo y a otros documentos administrativos.

La portavoz de IU-Equo, Inma Omiste, señala que su Grupo rechaza que el Ayuntamiento pueda "hacer entrega" a una empresa privada un espacio público para que ésta lo aproveche para promocionar o dar visibilidad a su marca corporativa, y tal y como parece, sin finalizarse un procedimiento administrativo establecido conforme al ordenamiento jurídico.

Y no comparten que una institución democrática entregue sin condiciones a cualquier entidad de carácter privado, por mucha influencia o vinculación que la familia propietaria de la empresa pueda tener conMotril. Algo que a juicio del Grupo es lo que ha sucedido con la Bodegas Montero. 

Omiste declara que mientras que los invitados "honraban y rendían pleitesía a esta familia el pasado sábado, nuestro recuerdo y sentimiento, una vez más, iban dirigidos a los trabajadores víctimas del incendio de Ron Montero en el año 2014,  y en particular, para el trabajador fallecido y sus familiares y, también, para los que resultaron gravemente heridos, y su familia, que no han dejado de padecer el suplicio de las consecuencias del incendio y de la actuación miserable y mezquina de la empresa durante el largo tiempo que ha durado el proceso judicial".

En 2020, una sentencia de la Audiencia de Granada condenaba en firme a tres años de prisión a la que fuera administradora única de Ron Montero, Andrea Martín Targa, como autora criminalmente responsable de un delito de homicidio imprudente y de dos delitos de lesiones por imprudencia grave.

La alcaldesa de Motril, Luisa García Chamorro, firmó un escrito en apoyo de la concesión del indulto con el membrete del Ayuntamiento, además apoyaron la petición del indulto diversos empresarios locales, vecinos, el diputado del PP por Granada, Carlos Rojas, además del presidente provincial de VOX, Manuel Martín Montero, familiar de la condenada.

En mayo de 2022 el gobierno indultó a Martín Targa a pesar de la oposición de la Fiscalía ante "la gravedad de los delitos cometidos". 

Por último, Omiste manifiesta que su formación comparte y suscribe plenamente las palabras de Miguel Lorenzo, uno de los trabajadores heridos, tras concederse el indulto a la responsable de la empresa: "No somos conscientes de las vidas que cuesta la siniestralidad laboral. Nos quedamos en una página de sucesos en un periódico y lo que hay que hacer es reforzar las medidas y acabar con la lacra, no indultar".