El Villarreal, con tantos de Bakambu, cerró una gran primera vuelta al imponerse por 2-0 a un Sporting sin pegada ante el que el equipo local supo aprovechar sus oportunidades. Lo mejor para el conjunto castellonense, que estuvo más espeso de lo habitual, fue el triunfo ante un rival que fue capaz de manejar el juego, pero incapaz de generar peligro.

Salió el Villarreal fuerte con la idea de poner el partido de su lado y llegó a crear problemas al rival, pero esa intensidad no duró más de diez minutos, ya que el conjunto asturiano se hizo pronto con el dominio del juego, aunque con problemas para llegar a la meta de Areola.

El juego de los asturianos pasaba por su calidad, mientras que el Villarreal, desconectado y sin balón, no estaba cómodo sobre el terreno de juego.

En el minuto 22 llegó el gol anulado al Sporting en un saque de banda que el árbitro consideró que había entrado en la meta del equipo local sin que ningún jugador tocara el balón a pesar de que tanto el meta local como el visitante Bernardo pudieron haberlo rozado en una acción muy difícil de apreciar. El Villarreal reaccionó a esta circunstancia y muy poco después un balón robar por Bruno acabó en una acción de Soldado que Bakambu remató a puerta vacía para hacer el 1-0. El gol golpeó al Sporting, que perdió fuelle y seguridad por unos minutos, casi tanto como al salir de vestuarios tras el descanso y encajar otro gol de Bakambu que ya fue definitivo.