Maodo Nguirane, recambio de Ferran
COVIRÁN GRANADA
El pívot senegalés firma para lo que resta de campaña
La mentira tiene las patas muy cortas, al contrario que las del pívot senegalés Maodo Nguirane, nuevo jugador del Covirán Granada para lo que resta de temporada. Lo que la tarde del miércoles era un 'no' del club hacia un fichaje que supliera la baja de larga duración del catalán Ferran Torres se convirtió muy pocas horas después en un 'sí'. El jugador incluso entrenó ayer por la mañana con el equipo y se hizo las fotos oficiales.
Un fichaje que se ha llevado con secretismo relativo. Era de extrañar que la entidad, pese a negarlo mientras el jugador viajaba a Granada, no buscase un plan B después de conocer que el alcance de la lesión de Ferran Torres le iba a hacer perderse prácticamente toda la segunda vuelta. El Covirán se movió rápido para encontrar poderío en la pintura. Nguirane viene a aportar un perfil de pívot diferente a Devin Wright. El africano es más alto, ya que mide 2,10 metros, y corpulento, con lo que ello supone en ambos lados de la pista.
Maodo Nguirane tiene 24 años experiencia en España, donde se formó en las filas del Unicaja de Málaga. En el equipo costasoleño llegó a jugar 16 partidos en la Liga ACB, además de debutar en Euroliga. Jugó en LEB Oro hasta la temporada pasada, pasando dos temporadas en el Clínicas Rincón, una en el Basket Navarra y una en el TAU Castellón. Este curso tuvo su primer aventura en el extranjero, en concreto en la liga búlgara, de donde llega procedente desde el Akademik Bulteks.
Para Pablo Pin, Nguirane "nos permite incrementar el nivel físico de la plantilla", y además "nos aportará aún más ritmo defensivo". "Es muy buen reboteador, tiene facilidad para taponar e intimida mucho; y en ataque le vamos a pedir que aporte en el rebote ofensivo, que pueda anotar en el balón doblado y que trabaje para el equipo" describió el entrenador a su nuevo jugador.
Por su parte, Nguirane dijo elegir Granada "porque es un gran club con una buena plantilla y cuenta con jugadores muy luchadores", por lo que "juntos podemos llegar más lejos y conseguir algo grande". "Me encuentro con muchas ganas y en forma. Estoy muy feliz por volver a Andalucía de nuevo. La considero mi casa después de la etapa en Málaga. Vengo para dar lo mejor que tengo, ayudar al equipo en todo lo que haga falta y seguir creciendo como jugador", concluyó el pívot senegalés, que ya entrenó ayer en el Palacio.
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