Covirán Granada | A aro pasado

El aplauso de Pablo Pin a su equipo, un reconocimiento a la labor del Covirán Granada

  • El técnico rojinegro se mostró muy satisfecho del rendimiento de su equipo ante Estudiantes

Pablo Pin aplaude a sus jugadores en el vestuario del Palacio de Deportes.

Pablo Pin aplaude a sus jugadores en el vestuario del Palacio de Deportes. / Fermín Rodríguez / Fundación CB Granada (Granada)

Cuando parecía que el Covirán Granada tendría complicado participar en la Copa Princesa que mide a los dos primeros clasificados al término de la primera vuelta de la LEB Oro, la victoria ante el Estudiantes lo ha vuelto a meter en la pelea. Disputar esa competición es un premio a la regularidad, pero a buen seguro que Pablo Pin y su cuerpo técnico firman no jugarla y terminar ascendiendo a la ACB.

Al Palacio de Deportes llegó el máximo favorito para regresar a la máxima categoría del baloncesto nacional y mordió el polvo. En un gran encuentro, sobre todo a nivel defensivo, los rojinegros ofrecieron un nivel de intensidad que sorprendió desde el inicio a los madrileños, que cosecharon así su segunda derrota de la temporada. La clasificación en su zona alta está muy igualada y entre el segundo, el Covirán, y el séptimo tan sólo hay una victoria de diferencia.

El aplauso

Pablo Pin, en la típica charla post partido, aplaudió a sus jugadores por el excelente encuentro realizado ante el líder. Un aplauso que la grada también ofreció al término del choque en una fiesta que hacía tiempo que no se vivía en la instalación del Zaidín. El equipo dio una vuelta al ruedo mientras la Demencia pedía que sus ‘toreros’ salieran del vestuario a saludar. Todos eran conscientes de la importancia del choque, ya no sólo por volver a la senda del triunfo, sino para reivindicarse en cierto modo ante todo un Estudiantes. Y demostrar, además, que están capacitados para ganar a cualquier rival si se ponen el mono de trabajo.

Y eso que faltan dos piezas muy importantes. En el club ya se están planteando reforzarse de cara a la segunda vuelta y seguramente sea necesario, sobre todo en la zona. Como dijo Pin al poder contar con Ellisor tras superar el Covid-19 “un hombre más se nota y mucho en la rotación para poder mantener la intensidad”. Y no le falta razón. Pues con tres piezas más (Christian Díaz, Pardina y un posible fichaje) la historia, a priori, sería muy diferente.

Edu Gatell trata de capturar un rebote ante Estudiantes. Edu Gatell trata de capturar un rebote ante Estudiantes.

Edu Gatell trata de capturar un rebote ante Estudiantes. / Antonio L. Juárez / PHOTOGRAPHERSSPORTS (Granada)

Sin duda fue de las mejores noticias del encuentro. Los más de 5.000 espectadores que acudieron a la instalación del Zaidín se fueron más que satisfechos. Vieron a su equipo dejarse el alma, dominar a una entidad como la del Ramiro de Maeztu desde el primer segundo y sumar la octava victoria del campeonato. Eso provocó que al término del choque fueron muchos los que se quedaron en las gradas para reconocer el esfuerzo a los jugadores. La pena es que ese ambiente no es siempre así. Pero el Covirán está realizando una campaña como para contar con más apoyo de sus aficionados. Al final todo son resultados, pero lo cierto es que los nazaríes siempre compiten, tienen calidad y su juego va cada vez a más. Y eso merece una recompensa.

Gatell

Llegó en el mes de febrero tras rescindir contrato con Palencia. Pero desde el primer día mostró una gran ambición adaptándose perfectamente a la dinámica del grupo. Llegó incluso a jugar lesionado en la final ante Breogán demostrando un compromiso que fue bien valorado por la directiva y Pablo Pin. Renovó y poco a poco se está convirtiendo en una pieza fundamental en la zona. Edu Gatell es, a día de hoy, un jugador fundamental, que además está adquiriendo cada vez más galones. Es de esos jugadores que transmite a sus compañeros y la grada, que se implica, anima, pelea cada balón y encima cada vez está más acertado en ataque. Su intensidad defensiva es lo que le ha llevado a ser clave y, gracias a la confianza que le ha otorgado el cuerpo técnico, cada día se atreve a más cosas. La afición lo sabe y ya lo tiene como a uno de sus ídolos.

Esto sigue

Pablo Pin, que evidentemente se mostró muy satisfecho con el rendimiento de su equipo, dejó claro un mensaje. Pese a su juventud, tiene ya mucha experiencia y no quiso desaprovechar su comparecencia ante los medios de comunicación para lanzar afirmar que “hay que ser humilde y saber quiénes somos”. Es consciente de la importancia del triunfo pero quiere evitar que la euforia se instale en el vestuario y el entorno del club. Porque de nada serviría ganar a Estudiantes y dejarse llevar en la próximas jornadas.

Restan tres jornadas en este 2021 pero sólo se jugarán dos (Juaristi y Prat) y tres más para finalizar la primera vuelta más el aplazado ante Alicante. Se logró un triunfo de calidad pero no se pueden quedar ahí. Eso sí, el Covirán comienza a ser respetado pero desde la dirección técnica se quiere mantener los pies en el suelo.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios